Con una historia agridulce y un tanto de humor negro, la puesta en escena “Ho’ponopono” se presenta hoy y mañana en punto de las 21:09 horas en Teatro Clandestino Foro G, ubicado en El Pueblito.
Para iniciar, el escenario transporta a los personajes a una escena clásica de otoño, Pedro pisa las hojas doradas que han caído de los árboles, mientras en cada rincón del recinto resuena la canción “Las simples cosas”, interpretada por Chavela Vargas.
En un parque que podría ser de cualquier ciudad, Francisco y Gloria se encuentran después de tres años de no verse. Un día cualquiera, Pedro decidió salir a tomar aire y nunca regresó, huyó del amor, de la estabilidad, de lo complicado y engorroso de la relación que vivía.
En entrevista exclusiva para EL UNIVERSAL Querétaro, el actor y director de la obra Pedro González, y la actriz Rubí Cervantes, hablan sobre sus personajes y la historia detrás de esta tercera temporada de “Ho’ponopono”.
¿Cómo describen a Ho’ponopono y de dónde proviene el nombre?
Pedro: Es un texto y dramaturgia mía, esta es la tercera temporada. Es una historia bellísima que habla de la reconciliación de una pareja que se reencuentra después de tres años, como dice Gloria (el personaje), se va a oxigenar un poco y se demora de más porque la abandona y no regresa. Es una obra muy linda, en la que estos personajes se tienen que decir cuatro cosas muy importantes: te amo, lo siento, perdóname y gracias, que es la base de “ho’ponopono”, una técnica de sanación hawaiiana, donde se sabe que las palabras que tienen mayor carga energética y que acaban siendo las más sanadoras no son sólo para los seres humanos, sino para las relaciones. Estoy fascinado de poder compartir escenario y de armar este gran equipo.
¿Cómo se logra la sinergia entre ser director y actor?
P: Me es fácil, mi cabeza funciona de manera muy clara, y como soy el dramaturgo, sé qué es lo que quiero que el personaje haga, porque lo tengo conceptualizado desde el momento en el que lo escribí.
¿Cuáles son los elementos y técnicas que se utilizan en esta puesta en escena?
P: Quisimos recrear una especie de postal, estamos haciendo un rompimiento “Brechtiano”, es decir, en el escenario todo está separado, pero en realidad los personajes solo actúan en un cuadro, eso es muy interesante porque mientras están en la escena, también interactúan con el público y lo atrapan. Este tipo de teatro está hecho para valientes porque vivimos en un mundo en el que sentir ya no está permitido y esta puesta en escena te conmueve, te hace pensar, te cimbra, y también te hace reír, es una comedia, no una farsa.
¿Qué tipo de obras se muestran en el Teatro Clandestino?
P: Lo que hace foro clandestino son obras que interpelan a la inteligencia y el raciocinio; hace que el público se enoje, se conmueva y suelte carcajadas, en esta obra sí te ríes muchísimo porque la comedia del espectador, es la tragedia de los personajes y entonces mientras más tragedia vivamos, más comicidad se vive.
¿Por qué recomendarían venir a esta obra?
Rubí: Es una historia con la que podrás identificarte, van a sentir, reír, llorar y también van a reflexionar, hace pensar que a partir de esta risa pueden identificar los vicios y virtudes que tenemos como seres humanos.
P: Es una obra profundamente humana, toca el tema de la sexualidad femenina en este mundo de machos, creo que también es una postura hacia la igualdad y equidad de ser felices y hacer con nosotros, lo que más nos plazca.
