El traslado de residuos peligrosos por carreteras debe ser más vigilado, pues la mayoría de las empresas que transportan este tipo de materiales lo hacen en dobles remolques, poniendo en riesgo a los automovilistas que transitan por las carreteras, dijo el presidente de la Alianza Mexicana de Organizaciones de Transportistas (AMOTAC), Rafael Ortiz Pacheco.
En entrevista, señaló que la Norma Oficial Mexicana (NOM-012) que entró en vigor ayer, establece ciertos pesos y medidas para el autotransporte de carga, “pero la misma habla de hacer parejo el transporte de cemento, varilla y gasolina. Hoy vemos que los vehículos que transportan residuos peligrosos no cumplen con esta medida y no los obligan a que cumplan”.
Indicó que esta norma habla de darle otros dos años a los autotanqueros para reducir su capacidad, cuando ellos tienen desde 1994 que no cumplen, pero les siguen dando permisos.
Acotó que “la mayoría de las empresas que transportan residuos peligrosos van en doble remolque y esto está prohibido también por Protección Civil. También circulan con amoniaco, por ejemplo. “Acabamos de tener un accidente en Puebla donde se desprendió un doble remolque muriendo cuatro personas”, recordó.
Circulan todos los días excediendo el peso, dimensiones y la seguridad, entonces no encuentran eco en la Policía Federal para cumplir la ley. “Las empresas hacen esto para según ellos competir, llevando más carga y cobrar más dinero y competir entre ellos”, recalcó.
Subrayó que un chofer labora alrededor de 20 horas diarias, lo que también es un riesgo, porque nadie les revisa las bitácoras de trabajo.
Pros y contras. Sobre la NOM-012 que recientemente entró en vigor, comentó que tiene puntos muy buenos, pero lo mejor de todo es que ahora si se cumplirá por parte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y de la Policía Federal.
Entre los puntos de la NOM-012 se establece que la conservación del peso bruto vehicular para los tractocamiones doblemente articulados o full en 66.5 toneladas, y para el diferenciado 75.5 toneladas, que circularán en caminos Tipo ET y A, y en carreteras tipo B si cuentan con autorización especial de conectividad.
Además, contempla que la velocidad máxima permitida para los fulles diferenciados, con peso adicional, será de 80 kilómetros por hora, y los choferes tendrán que acreditar que tienen la capacitación y experiencia para manejar este tipo de unidades. Asimismo, vehículos doblemente articulados deberán contar con equipo con tecnología de punta por seguridad, tal como frenos ABS, GPS, freno auxiliar de motor o retardador o freno libre de fricción.
Ortiz Pacheco apuntó que tanto la Policía Federal como la SCT tienen básculas necesarias en el país, para hacer cumplir la norma, pues deben de ser eficientes, adecuadas y modernas.
