CHICAGO.— Tan sólo 10 juegos duró la temporada para Derrick Rose. El guardia de los Toros de Chicago se perderá el resto del calendario debido a una operación a la que se sometió en la rodilla derecha para reparar el minisco medial.
La cirugía fue practicada por el doctor Brian Cole, el mismo que le reconstruyó el ligamento anterior cruzado de su rodilla izquierda en mayo de 2012.
Habían dos opciones sobre la dirección que Rose y sus doctores podían tomar para arreglar la rodilla. La primera era remover el menisco, o una porción. Sí accedían a ello, Rose podía estar de vuelta en las duelas en cuestión de semanas.
El inconveniente es que varios jugadores que se sometieron a ese procedimiento como Dwyane Wade del Heat de Miami han señalado que les ha causado muchos problemas en su carrera.
Rose decidió tomar la opción más larga con la esperanza de regresar a ser el mismo que sorprendió a la NBA con su habilidad.
La nueva lesión del jugador de 25 años ocurrió en el tercer cuarto del juego contra Portland. Rose perdió el equilibrio cuando trataba de regresar para defender un contraataque de los Blazers. Regresó a la cancha cojeando sin apoyar la rodilla y una vez que Portland anotó salió del juego en un tiempo fuera.
Esta lesión reaviva recuerdos del juego inaugural de la postemporada de 2012 contra Filadelfia, cuando Rose ingresó a la cancha con mal semblante cerca del final del juego con la lesión en el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda. Ello significó que Chicago, primero en la preclasificación, fuera eliminado en la primera ronda y que el equipo se mantuviera en un patrón de espera la temporada pasada mientras se recuperaba su astro.
Los Toros acumulan esta campaña récord de 6-6 y luchan por obtener al término de la campaña un lugar de playoffs de la Conferencia Este.
