Un momento inédito en el automovilismo mexicano. Con uno de los nuestros en tres podios de F1 en un mismo año, al mismo Sergio Pérez firmando para correr con un histórico como McLaren y la confirmación de un segundo piloto nacional titular para 2013, con el salto de Esteban Gutiérrez de ser suplente a asegurar un auto propio con la escudería de Sauber.
Pero también a un Memo Rojas Jr. como tetracampeón de la Grand Am, para proclamarse como el piloto nacional más vencedor en un serial internacional, y a un Benito Guerra Jr. como el primer mexicano vencedor en una categoría de rallies regulada por la Federación Internacional de Automovilismo (FIA).
Son síntomas de lo que empieza a solidificarse como la mejor etapa del automovilismo tricolor de todos los tiempos. Una época dorada en la que Sergio Pérez es la punta del iceberg.
El tapatío vivió momentos memorables cuando alcanzó el segundo lugar en el Gran Premio de Malasia, apenas en la segunda carrera de la temporada. Checo Pérez tenía un coche cada vez más rápido y, en las últimas vueltas, estuvo cerca de rebasar al Ferrari de Fernando Alonso, pero sufrió un derrape tras recibir la orden de que cuidara los puntos.
Cinco carreras después, Pérez volvía a festejar en el podio de vencedores con su tercer lugar en Canadá. Pero una fecha antes, el de Sauber había logrado su primera vuelta rápida durante el circuito callejero de Mónaco, el asfalto de su accidente en 2011.
Tres podios en un año representaba la mejor actuación de un méxicano en una temporada de Fórmula Uno. Algo que sólo había conseguido Pedro Rodríguez en la campaña de 1968.
Y cuando aún faltaban seis Grandes Premios en el 2012, Sergio Pérez fue anunciado como el nuevo fichaje de la escudería británica de McLaren en sustitución de Lewis Hamiltón, campeón del mundo en 2008.
“He trabajado muy fuerte para alcanzar esta etapa de mi carrera, y ahora estoy ansioso para esta siguiente y aún más emocionante etapa. Es fantástico que todos los sacrificios que he hecho, ahora estén rindiendo frutos”, dijo el tapatío el pasado 28 de septiembre.
Sergio terminó en el décimo lugar en el campeonato, con lo que mejóró seis posiciones respecto a su temporada de novato. Un 2012 en donde, con sus resultados, representa a una generación dorada en el automovilismo mexicano.
