Hace un par de semanas leí un artículo acerca de un cantante que enfrentaba varias denuncias, esto me hizo pensar acerca del valor que tienen sus canciones y cómo estas han impactado a miles de personas. Es por esta razón que hoy quiero plantearte esta pregunta: ¿podemos separar el contexto de la vida personal de los artistas con las obras que han producido? Para responder esto, te contaré esta y la siguiente semana acerca de varios artistas que se han consagrado dentro de la historia del arte, pero que han estado inmersos en situaciones turbulentas.

Uno de los grandes movimientos de la historia del arte es el barroco, donde personalidades como Bernini o Artemisia Gentileschi elevaron la vara de la creación artística dentro del círculo del arte. Sin embargo, hoy te contaré del chico malo de este movimiento: Michelangelo Merisi da Caravaggio. La vida del artista, al igual que su pintura, estuvo llena de tenebrismo, esto lo podemos confirmar gracias a los archivos judiciales de Roma, donde podemos conocer a detalle su registro policial, éste está lleno de más de 15 incidencias, las cuales van desde riñas, vandalismo, difamación, hasta un homicidio, este último cambió su vida por completo. En marzo de 1606 en Roma, Caravaggio y sus amigos asistieron a un juego de lo que ahora es el tenis, su gran afición los llevó a retar a otro equipo, se estipuló que el equipo que se llevara la victoria ganaría una gran cantidad de dinero. Lamentablemente el equipo de Caravaggio perdió, esto provocó una gran disputa, ya que el artista se negó a pagar la apuesta, es así como la riña inició, ambos equipos desenvainaron sus espadas y empezaron a luchar. El artista atacó gravemente a Ranuccio Tommassoni, se dice que cuando estaba lesionándolo, por error, le provocó un corte en una arteria, el cual terminó la vida de Tommassoni. Muchos testigos de la escena apelaban que había sido un accidente y que el artista merecía el perdón; sin embargo, la ley no lo dejó pasar por los antecedentes del artista, es así que por temor Caravaggio huye a Nápoles, al no presentarse a la corte el juez lo destierra de Roma y dicta una orden de captura, en caso de ser visto en la ciudad, inmediatamente sería remitido a la cárcel. Se dice que en Nápoles tuvo una buena vida, llena de encargos y de respeto; sin embargo, su naturaleza violenta lo llevó otra vez a cometer un delito y a fugarse. Una de las teorías de su muerte se deriva de este delito, ya que se dice que cuando se fugó fue perseguido y encontrado por personas con deseos de venganza.

La vida de Caravaggio fue muy tormentosa, a tal punto que por muchos años se negó el valor de sus pinturas. Su estilo fue único y extraordinario, rompió con todas las convenciones de su época y creó obras de una calidad artística inimaginable, a pesar de su registro criminal, su pintura influyó y asentó las bases para la pintura barroca en Europa. En la actualidad las obras de Caravaggio se encuentran en los museos más importantes del mundo, se cuentan historias de sus procesos artísticos tan peculiares, pero se evita contar de sus antecedentes policiacos, esto tal vez porque conocer su vida puede nublar la manera en que apreciamos su arte.