A la par de su labor en la dirección de la Orquesta Filarmónica del Estado de Querétaro (OFEQ), Ludwig Carrasco trabaja en el rescate de la obra de compositores mexicanos que han quedado en el olvido; hace unos días reestrenó una pieza de Manuel Reyes Meave, y está estudiando los archivos de José Vásquez y Antonio Gómezanda.
Carrasco destaca por ser un incansable promotor de la música contemporánea, ha estrenado como director y violinista más de 100 obras de creadores nacionales y extranjeros, pero también está preocupado por el legado que han dejado los compositores mexicanos.
“Desde hace muchos años tengo interés en la música mexicana y a raíz de que estuve buscando más conciertos para violín, descubrí que hay muchas obras que están rezagadas en las bibliotecas o en las bodegas de los familiares de compositores ya fallecidos, y creí que era muy importante darles una voz y salida para que la gente los conozca”, dijo Carrasco a EL UNIVERSAL Querétaro.
Este 2018 el reconocido violinista ingresó al Sistema de Creadores Escénicos con Trayectoria, del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, con su proyecto de difusión y revalorización de la música mexicana; y como parte del mismo proyecto interpretó en la Escuela de Laudería, acompañado de Querétaro Symphonietta, el bellísimo Concertino para violín y orquesta de Manuel Reyes Meave, siendo esta su primera presentación en Querétaro, como violinista.
El proceso de recuperación de la obra de Reyes Meave incluye una edición crítica, que de forma digital podrá estar al alcance de músicos y estudiantes a partir de enero de 2019.
“La idea del concierto era realmente un poco la excusa de presentarlo al público, aunque fuera en pequeño comité, y eso nos sirvió para ver cómo están los materiales. En enero sacaré una edición crítica, se llama así porque es lo más fiel posible a lo que escribió el compositor, y se va a distribuir gratuitamente a todos los músicos interesados, principalmente a escuelas, para lograr que lo conozcan y que en un futuro, no muy lejano, ya esté dentro del repertorio de los conciertos y también de los conservatorios, me interesa mucho eso, que siga vivo y que se siga promoviendo este legado”, agregó.
Del archivo a los escenarios
Manuel Reyes Meave fue compositor, investigador y figura central en la educación musical de México en los años 60 y 70, pero actualmente su obra y estudios de su vida, son prácticamente desconocidos, construyó instrumentos de arco, escribió obra para piano, suite para orquesta de cuerdas y varias piezas de música de cámara, pero nada de ello está editado.
Su Concertino para violín y orquesta permanecía en la Biblioteca Cuicamatini de la Facultad de Música de la UNAM, pero al ir a buscarlo, la pieza no estaba en la carpeta correspondiente, por lo cual los encargados del archivo se llevaron varios minutos en ubicarla. Así como éste, dijo Carrasco, es seguro que otros materiales se encuentren traspapelados, mal archivados o extraviados en los acervos familiares de los mismos compositores, porque su obra no se programa en los conciertos, ni se estudia en las escuelas de música.
“Hay muchos archivos así, porque es un círculo vicioso, cuando no se programa la música, no hay el interés ni la necesidad de tenerla ordenada y no es fácil acceder a ella, y hay que romper por algún lado ese círculo, es una pena porque seguro hay muchos otros archivos, incluso de otro tipo de música, en catedrales hay archivos coloniales o música virreinal muy vastos, amplios, y muy importantes que están ahí perdiéndose porque no están en las condiciones necesarias, y es un trabajo que urge hacer, pero depende también de nosotros los músicos mexicanos exigir, pedir, o incluso ayudar a que todo eso se normalice, porque es nuestra música, es nuestra memoria histórica musical que no debemos dejar perder”.
Dos compositores más están en la mira del violinista, se trata de José Vásquez y de Antonio Gómezanda, de este último compositor su obra se encuentra en Estados Unidos, y por lo mismo es poco conocida en México.
“En cuestión de repertorio para violín está José Vásquez, de él ya reestrené, hace como cuatro años, un concierto de violín pero no había salido una edición y se va a lanzar una publicación, espero para el próximo año o tal vez en 2020, y otro compositor que me interesa mucho es Antonio Gómezanda que tiene bastante repertorio muy bueno, lamentablemente no se conoce en México porque su archivo está en Estados Unidos, ahí sí está muy bien cuidado, y por suerte he tenido la facilidad de estar en contacto con las personas encargadas del mismo, y esperamos que se pueda rescatar para 2019”, adelantó el músico.
Por el momento Carrasco seguirá trabajando con el acervo de Reyes Meave, y a finales de enero o principios de febrero, contempla un nuevo recital en Querétaro con una obra de violín y piano, además no descarta la posibilidad de un reestreno con la OFEQ.
“Me gustaría presentar la otra obra que está en edición, la Sonatina de violín y piano, y quiero seguir explorando porque sé que hay algo de obra para orquesta y sería un placer hacer algo con la Filarmónica de Querétaro, porque es importante que se escuche y que otras orquestas vean que es muy buena obra, se trata de eso, de recuperar un patrimonio que se nos está yendo de las manos y mejor rescatarlo antes de que se pierda definitivamente, porque sería una gran pérdida”, expresó el músico y director de orquesta.
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