Las niñas Frozen y las mamás se dieron cita en el teatro Metropolitano de Querétaro, donde se escenificó, por único día y en doble función, el musical de la película del mismo nombre.
A las niñas les gusta Frozen, porque encapsula todos sus sueños: ser princesas, con un castillo, sobre un paisaje nevado, conocer a un príncipe y enamorase.
Las niñas Frozen visten de princesas (obviamente) y su color favorito es el verde turquesa.
Llevan una diadema y hacen magia con una varita de que brilla hasta que las pilas se les acaban.
Las niñas Frozen se saben todas las canciones de esta película y algunas las cantan a grito pelado, mientras sus mamás Frozen las graban para luego subirlas al ‘Face’.
Las niñas Frozen también son pequeñas atrevidas y muy divertidas: “Y si hacemos un muñeco, ven vamos a jugar…”.
Las niñas Frozen enloquecen cuando sale a escena un muñeco de nieve con nariz de zanahoria.
A las niñas Frozen, que van de los dos hasta los 10 años de edad, les gustan los príncipes.
Las niñas Frozen sueñan, viven, duermen, comen y juegan con ser, algún día de grandes, princesas de un cuento de hadas, con muñecos de nieve.
