El gobierno federal sí construirá un nuevo Centro Estatal de Salud Mental (Cesam), confirmó Julio César Ramírez Argüello, secretario de Salud estatal; aclaró que no será un hospital siquiátrico, pero sí tendrá un área para contener a pacientes con alguna crisis.
Recordó que el gobernador Francisco Domínguez Servién acordó con el titular del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) y el director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Zoé Robledo Aburto, la entrega de las actuales instalaciones del Hospital General de 5 de Febrero para que lo opere el IMSS con el compromiso de la construcción de un nuevo Cesam.
El gobierno estatal desalojará el actual hospital para mudarse al nuevo Hospital General que se prevé pueda ocuparse en el segundo semestre del año, por lo que el IMSS tendrá oportunidad de extender sus servicios.
“Está en el papel ahorita [el proyecto]. Se están haciendo las adecuaciones, tenemos cita para llevar el proyecto y que nos digan qué va a pasar, es un acuerdo que hizo el maestro Ferrer, el maestro Robledo y el gobernador, en cuestión de que nosotros donamos toda el área del Hospital General actual y ellos nos iban a hacer un Centro Estatal de Salud Mental”, señaló el funcionario estatal.
Ramírez Argüello dijo que el nuevo centro deberá cumplir con las necesidades actuales del estado, y el gobierno del estado donará el terreno para la edificación.
El actual Hospital General, que opera el gobierno estatal, cuenta con un albergue y a un costado tiene al Cesam, todas esas instalaciones serán administradas por el IMSS.
Por ahora, el secretario de Salud dijo que trabajan en el diseño del proyecto para saber qué dimensiones tendrá, cuánta capacidad, y si es necesario ampliar el personal, aunque se prevé que no incrementará en ese tenor.
El nuevo Cesam, tal como opera el actual, será para consulta externa, aunque también se contempla un área para la atención de urgencia de los pacientes; es decir, para hospitalización parcial. “No va a ser un hospital en forma, va a ser un lugar de consulta externa y vamos a tener, nosotros le llamados un área de contención del paciente en estado agudo, algún brote sicótico, algo que requiera hospitalización parcial y temporal en lo que se estabiliza y mandarlo a un centro en donde se tenga toda la capacidad y experiencia”, señaló Ramírez Argüeyo.
La Secretaría de Salud informó puntualmente que se tiene acuerdos con gobiernos de entidades vecinas que sí cuentan con hospitales siquiátricos para que reciban a los pacientes de Querétaro, por lo que serían trasladados a esos nosocomios en caso de requerirlo.
El funcionario estatal agregó que, además de que se sigue sin justificar la creación de un hospital siquiátrico —por el costo de operación— tampoco tienen el suficiente personal especializado para la atención del lugar.
“Aquí no contamos con la suficiente experiencia para manejar a este tipo de pacientes, es toda una especialidad (…). La idea es que sea el mismo personal que tenemos ahorita para que se haga la contención aguda”.
Creo que no vamos a crecer el personal, aparte no hay tanto sicólogo ni tanto siquiatra para poderlos contratar”, asegura el secretario de Salud estatal.
