Sólo encharcamientos se presentaron en la entidad con la precipitación del pasado martes, reportó el director de la Unidad Estatal de Protección Civil, Gabriel Bastarrachea Vázquez; también confirmó que el estancamiento en el distribuidor Conexión Río se debió al arrastre de tierra, piedras y basura.
Confirmó que la lluvia tuvo presencia con mayor intensidad en la zona del Centro Histórico de la ciudad de Querétaro y en algunas zonas de Corregidora, en este último municipio se reportó el ingreso de agua a una escuela, “pero sin mayores consecuencias”.
“Prácticamente fueron encharcamientos en vialidades, algunas importantes, y escurrimientos en las zonas bajas […]; la acumulación del agua en la parte baja de boulevard Bernardo Quintana (bajo las vías del ferrocarril) se debió a un tapón en la red por material pétreo, orgánico y desechos que limitando la conducción del agua”.
El martes, alrededor de las cuatro de la tarde, los automovilistas no pudieron continuar su trayecto en dirección al sur, debido a que el agua alcanzó el metro de altura; casi una hora después la vialidad quedó liberada por el trabajo del personal de Servicios Públicos Municipales de la capital.
El funcionario fue enfático en explicar que “el taponeo” se debió al arrastre de diversos materiales provocados por escurrimientos, desde tierra, piedras y basura; aclaró que no fue determinante pero sí un factor que influyó en que el nivel del agua subiera.
Incluso, explicó que ha habido registro de lluvias más fuertes (que las del martes) peor que no registran afectaciones o el taponeo de las alcantarillas en esa zona.
En otros puntos del estado se presentaron lluvias menores, sin mayores contingencias; y en la zona metropolitana los encharcamientos afectaron, principalmente, el flujo vehicular.
“Una vez que trabajó el personal de Servicios Públicos municipales se normalizó el flujo pluvial; sólo Corregidora presentó ingreso de lodo y agua en una escuela y algunos encharcamientos a nivel de banqueta en algunas colonias de la zona centro”, reportó el funcionario.
Recurrente
En junio del año pasado, cuando estaba en construcción Conexión Río (el distribuidor de Bernardo Quintana en la intersección con avenida Universidad) ocurrió un fenómeno similar, cuando la lluvia arrastró material de construcción y tapó las alcantarillas de la zona. En aquella ocasión se informó que el agua arrastró material como tepetate, arena y grava, además de basura, lo que impidió el flujo del agua. La contingencia de 2016 provocó el cierre de la vialidad por más de dos horas el 16 de junio. Bastarrachea Vázquez reiteró el llamado a la población para que tome las precauciones necesarias, debido a que el Servicio Meteorológico Nacional pronostica que continuarán las lluvias, aunque de menor intensidad, en lo que resta de la semana.
