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Tras haber perdido el año pasado su patrimonio casi por completo a causa de las lluvias, los palaperos de La Estancia resurgen como centro turístico muy cerca de la cortina de la presa Constitución de 1917, donde todos los días se ofrecen pescados y mariscos, así como gastronomía local.
Por el momento son siete las palapas que han sido rehabilitadas y que ya se encuentran recibiendo a casi cuatro mil personas por semana, así lo dice Julio Cesar Rivera, miembro de la familia propietaria de la palapa El Charquito, uno de las más populares en la zona.
Con música en vivo, los visitantes, además de degustar las delicias culinarias del lugar, pueden realizar recorridos a caballo, en cuatrimoto o en lancha. Y para los más pequeños encontrarán juegos infantiles sitios donde se puede alimentar a los pelicanos, así como tener la experiencia de pescar.
Para los días de Semana Santa, El Acapulquito, como es conocido, espera incrementar 100% los clientes, ya que aseguran, sus precios son 30% más bajos que los restaurantes de San Juan del Río.
