El procurador estatal de Protección al Medio Ambiente y Desarrollo Urbano, Alfredo Zepeda Garrido, informó que en la entidad hay entre 20 y 30 tiraderos clandestinos, mismos que calificó como pequeños, pero que deben ser atenidos por las autoridades correspondientes. 

“Clandestinos podrían ser 20, 30, de pequeño tamaño. Pero no por ello deben ser ignorados, sino atendidos, entre otras cosas clausurados por no estar de acuerdo con la normatividad”, declaró.

Destacó que estos sitios que operan clandestinamente pueden ser clausurados por consentimiento de la misma procuraduría.

“Hay rellenos sanitarios que en algún momento dado han sido clausurados, otros están operando, tal vez haya unos 20 sitios de esta naturaleza”.

Quienes incurran en este tipo de faltas ambientales pueden ser sancionados económicamente, además de procederse con la clausura del sitio.

Para verificar que los tiraderos operen reglamentariamente se llevan a cabo labores de vigilancia, inspección y también se solicita a los propietarios que muestren la documentación que indica que el tiradero está al margen.

Por tanto, las amonestaciones “pueden llegar hasta 20 mil salarios mínimos. Son sanciones de tipo económico por daño ambiental, ya sea por olores o por contaminación de suelos”, destacó Alfredo Zepeda.

Aunque el procurador del Medio Ambiente no descartó que también haya casos que más que ameritar una sanción sean propenso a recomendaciones, tal es el caso de los rellenos sanitarios municipales. “Ya hay acciones que podrían llegara sanción y otras a recomendaciones, a las administraciones municipales”. 

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