San Juan del Río es reconocido en Querétaro y en estados aledaños como uno de los sitios de mayor importancia en producción de rosas, concentrada mayormente en la comunidad de El Organal. Con 12 años de actividad 70 familias de esta localidad han dedicado su vida al cultivo y comercialización de esta flor, heredando la tradición a las nuevas generaciones.

Mas de 70 hectáreas de tierra son las que se dedican en El Organal para el cultivo de rosa; en esta localidad los campesinos han suplido la siembra de maíz por el de flores, siendo esta una actividad productiva más redituable.

Cuando las condiciones climáticas son benévolas los productores de rosa pueden obtener hasta 60 gruesas de flores por hectárea, actualmente cada gruesa se comercializa en 100 pesos a excepción de las fechas de mayor venta, que son 14 de febrero, 10 de mayo y 12 de diciembre, donde los campesinos tienen la oportunidad de incrementar ligeramente el costo atendiendo a la oferta y demanda.

El precio de las rosas se ha mantenido estable en los últimos 12 años como una estrategia de las familias dedicadas a esta actividad para poder ser competitivos, pues la presencia de vendedores de rosas de otras entidades ha afectado a los floricultores sanjuanenses, como refiere Fidel Álvarez, productor de El Organal.

Asegura que padres de familia, esposas e hijos se dedican por igual al cultivo y cosecha de flores; las familias que cuentan con zonas de siembra esperan que las nuevas generaciones continúan con la actividad que al momento representa el principal medio de ingresos económicos en El Organal.

Las flores son comercializadas mayormente en San Juan del Río y la capital del estado, sin embargo, los productores han logrado abrir mercado en el Estado de México, Guanajuato e Hidalgo aunque en menor proporción.

Para los productores los recientes festejos a la Virgen de Guadalupe representaron un incremento en sus ventas de hasta 50%; las familias dedicadas a esta actividad recorrieron las calles de la cabecera municipal para ofrecer sus flores.

Para los Días de Muertos, los productores de rosa de El Organal también logran obtener buenas ganancias, sin embargo, refieren que en los últimos años ha incrementado la presencia de vendedores del Estado de México y de Michoacán que se colocan en los panteones, lo que merma las ganancias de los floricultores locales.

Para poder establecer acuerdos comerciales que permita a los productores protegerse de la competencia, se ha establecido una cooperativa en la que hasta los primeros meses del año participaban cerca de 23 floricultores, pero se pretende concentrar a más familias dedicadas a esta actividad para que se vean beneficiados con la colocación de sus cosechas en el mercado local.

Para los habitantes de El Organal, producir flores es la mejor alternativa para mantener activas las tierras de esta región sanjuanense; la caída del precio del maíz en los últimos años ha hecho que más campesinos adopten la siembra de rosas como principal medio de ingresos, aunque refieren que son mayores los apoyos que el gobierno otorga para el cultivo de otros granos por encima de las flores.

Plagas y robos merman cosechas

Como en cualquier cultivo, el de rosas está expuesto a plagas y hongos que han puesto en jaque a los floricultores de El Organal.

Recientemente los habitantes se vieron afectados por la presencia de hongos en las rosas; la plaga se detectó en alguna parte de las 70 hectáreas que se destinan a la siembra de la flor y los productores temen que se propague.

Aunque la mayoría de los productores lograron colocar sus rosas en el reciente festejo del 12 de diciembre, temen que la plaga afecte las cosechas programadas para las ventas próximas del 14 de febrero del siguiente año.

Ante esta afectación, los productores han buscado el apoyo de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación a fin de que se analice el hongo y se determinen los agroquímicos con los cuales se pueda acabar con la plaga.

En la comunidad los ladrones se han convertido en la segunda “plaga” para los productores; tan sólo en noviembre perdieron 30% de sus flores derivado de los hurtos en la zona.

Los productores de rosas han solicitado mayor presencia de policías patrullando la comunidad para disuadir el robo de flores.

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