WELLINGTON.— Oribe Peralta sonríe al recordar los innumerables pasos dados por el Tricolor al borde del abismo. Es parte de su esencia. Desde pequeño se familiarizó con la adversidad, no le intimida.

También aprendió que el sabor de los logros sencillos no es dulce, por lo que disfruta estar a 90 minutos de obtener una dramática clasificación al Mundial Brasil 2014.

“Es algo que sufrimos, pero cuando padeces y batallas para conseguir las cosas, saben mejor”, asegura El Cepillo. “Es una situación que nos está tocando y esperemos hacer un buen juego en la vuelta”.

Para terminar la “Operación Rescate” de un navío que parecía condenado al naufragio hace pocas semanas, cuando los cambios de timón no surtieron efecto.

El medallista áureo en los Juegos Olímpicos Londres 2012 no estuvo en buena parte de la última ronda eliminatoria en la Concacaf, pero fue insustituible dentro de las alineaciones de José Manuel de la Torre, Luis Fernando Tena y Víctor Manuel Vucetich, cuando estuvo sano. Conoce perfectamente la amargura que inundó al vestuario tricolor después de cada fracaso y sabe que todas las frustraciones quedarán en meras anécdotas si oficializan la participación tricolor en la XX Copa del Mundo, sin importar que sea debido a un reintegro.

“Después de este partido, ganándolo, ahí estaremos más tranquilos, porque tendremos el boleto al Mundial”, subraya el lagunero más lagunero. “Tenemos que hacer valer los cuatro goles de ventaja que traemos… Sólo eso”.

Si cumplen la misión, por fin se librarán de los grilletes emocionales que se fueron apretando en perfecta proporción a como se complicó la situación tricolor en el Hexagonal Final.

Oribe reconoce que había tristeza y preocupación en el grupo, sentimientos de los que sólo quedan algunos vestigios. La desintoxicación se debe a la “forma de trabajar, unión de grupo”.

“Este equipo se ha conformado muy bien y la labor que ha hecho Miguel es muy buena”, complementa. “Estamos cerca del objetivo que nos trazamos desde el principio, lo cual nos motiva”.

“Siempre has querido pasar estos momentos. Las situaciones difíciles son para hacerte más fuerte y lo logras si las superas”.

Néctar de la felicidad

Él ya perdió la cuenta de las ocasiones que lo ha realizado. Por eso sonríe, goza, se ilusiona. Está convencido de que lo más complicado pasó. Es momento de saborear el néctar de la felicidad y archivar en el baúl del olvido las innumerables decepciones vividas en 2013.

Google News

TEMAS RELACIONADOS