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Hasta en las horas más cruciales del proceso que encabeza, José Manuel de la Torre mantiene la tranquilidad. Su secreto es tan simple como invaluable: la fuerza mental reunida en el grupo de elegidos para guiar al navío tricolor hasta las playas brasileñas.
Lo confirma cada que cruza miradas con sus futbolistas. El entrenador de la Selección Nacional está consciente de que otro empate serviría de poco, mas confía que esta noche contra Jamaica, ganen por primera vez en 2013.
“Está claro que la fuerza mental que tiene este grupo es muy sólida y sabe perfectamente que, dentro del futbol, corres riesgos de tener los tres resultados [triunfar, igualar o caer], pero cuando lo haces adecuadamente estás más cerca [de la victoria], lo cual fortalece”, asegura El Chepo, en charla con EL UNIVERSAL. “El grupo nunca ha perdido la seguridad de lo que hace, se encuentra convencido de cómo realizarlo; poderlo ejecutar adecuadamente nos ha dado buenos resultados [en el pasado]”.
Primera de tres paradas determinantes en la ruta tricolor rumbo al Mundial.
Tras visitar Kingston, el combinado mexicano jugará en Panamá (viernes) y recibirá a Costa Rica (próximo martes). Seguidilla de cotejos con la que De la Torre planea escalar varios sitios dentro del hexagonal final de la Concacaf, en el que actualmente se ubica quinto.
Además del agradable estilo mostrado frente a Nigeria, apela al temple.
“Desde luego que para ser futbolísticamente fuerte, tienes que serlo mentalmente. Eso se estructura en todos los aspectos”, sentencia. “No nada más es que son gente buena y tienen grandes cualidades, sino viene desde cómo está estructurado abajo, con quienes trabajan, les dan el apoyo”.
“[Los seleccionados] se sienten seguros, se trabaja en función de lo que se está buscando lograr y vamos paso a paso. A ellos les da la seguridad de que lo que se está haciendo, se realiza bien”.
Más allá de que ya son siete meses y medio sin ganar. El Chepo comprende la inquietud por las seis igualadas en lo que va del año.
“Esa presión que ejercen los medios [de comunicación], la gente, es normal porque no hayas tenido un par de resultados”, comparte. “Lo hemos sentido en cualquier club, pero Selección Nacional son palabras mayores. Estamos enfocados en seguir trabajando, porque un par de resultados te vuelven a poner o quitar de un margen de clasificación”.
“Los resultados son lo único que dejan tranquilo a todo el mundo, porque al final es lo que se queda grabado. Muchas veces, ni se acuerdan quién fue [el director técnico]. Simplemente, que ganó y puso [al Tricolor] en una posición”.
Meta a la que desea acercarse en una semana, cuando se juegue buena parte del boleto mundialista. Le es imposible ocultar su descontento por el comienzo, aunque confía en ese as bajo la manga llamado mentalidad.
“La cuestión es razonar adecuadamente para tomar las decisiones y que el jugador se dé cuenta de lo que significa estar en Selección Nacional, porque terminas siendo un referente para la sociedad, juventud, independientemente de lo que es profesionalmente”, recuerda. “Acá, la diferencia es que es algo público y está muy en el sentimiento de la gente mexicana”.
A la que promete responder, porque confía en la solidez mental y emocional de sus guerreros.
