Los colores no tienen propiedades definidas, de modo que podemos imaginar colores nuevos que quizá otros no hayan visto o imaginado antes, con una connotación diferente a la que tenemos de ese color en específico; por ejemplo, en algunos países de Oriente usan el blanco para representar la muerte o lo paranormal y en Occidente es símbolo de pureza o virginidad, para los beduinos donde la leche es la base de su dieta, el blanco lo relacionan con gratitud y fertilidad. Concluimos que depende nuestra cultura y percepción del mundo ayuda a definir un color u otro, pero no solo eso influye; podríamos imaginar un color verde, pero en mi imaginación este verde podría ser más amarillo y claro, al verde mas azul y oscuro que otro imaginó; o bien podríamos ver la misma manzana más verde dependiendo de la Luz que reciba o menos verde dependiendo si la anatomía del ojo tiene mas receptores de color o menos sensibilidad a la luz. Es perfectamente posible que, bajo ciertas circunstancias, ciertas personas reconozcan colores que nosotros no conocemos.

Pensemos ahora que todos de un momento a otro todos somos ciegos y no reconocemos ningún color, los colores tendrían la misma carga de propiedades o cambiarían los valores y significados que es hemos ido atribuyendo, que pasaría por ejemplo con el color blanco; sería la ausencia o ceguera a los colores como ver un lienzo en blanco, o veríamos todo en negro como la ausencia de luz para ver o distinguir colores, cuando un niño no colorea su hoja de papel, la ausencia del color es blanca hasta que el niño empieza a añadirle colores, pero según las leyes de la física el blanco es la unión de todos los colores y es hasta que se descompone esa luz blanca que vemos todos los colores del arco iris.

Debido a que hemos asociado al blanco con la luz o ausencia de ella, el blanco ha despertado admiración, si fuera una persona, seria admirado por ser un color limpio, exclusivo, elegante, autocrático, sublime e incluso divino, pero no sería uno de los más populares debido a que representa varios puntos en contra. Volvamos al niño coloreando que empezó a utilizar sus crayolas; verde para el pasto, rojo para el camión de bomberos, azul para el cielo, pero ¿como hace el blanco? No puedes crear blanco combinando otros colores, tiene que ser un pigmento blanco puro y cualquier rastro de color que lo toque solo lo llevara a otra dirección; nuestro cerebro procesa la luz, no como la unión de todos los colores, sino que entre más color de uno contenga menos luz de ese mismo color va a reflejar en nuestros ojos.

Por mucho tiempo consideramos como un color elegante y clásico, debido a que nuestra experiencia con un tipo de arte considerado clásico son las esculturas de mármol y las grandes edificaciones con columnas de mármol de la Grecia antigua; el blanco mármol incluso no es un blanco limpio, puede tener betas de tonos grises o amarillos que ensucian la superficie dando como resultado un blanco amarillento o un blanco grisáceo, pero que mármol es más blanco o menos blanco, quizá si lo vemos bajo la luz diurna vemos un blanco rojizo o bajo la luz de la luna sea un blanco azuloso; creeemos que el blanco no contamina con esquinas oscuras y que es un color pulcro tanto físico como psicológico: no permite que sea incorrecto o imperfecto, que es un color inmenso, plano, que no tiene fin y que se adapta a las curvas del espacio que habite; pero tambien puede ser un color ausente, incompleto, impreciso e incluso austero y de bordes difusos.

Para muchos artistas el blanco ha simbolizado el infinito por sus cualidades monocromáticas o incoloras, símbolo también de pureza por ser un material que mantenerse alejado de otros colores para no ensuciarse, este color ha dado alusión a lo sublime; no contiene planos, ni perspectiva o textura en un color que atrapa e invade al ocupar áreas grandes dentro de un lienzo. Pero el blanco no solo es la ausencia del color, es un color que nos lleva a la abstracción, a tratar de entender un “no color”. El blanco, en el sentido más existencialista, será la unión de todos los colores, tantos colores que nos refleja de forma tan brillante y llena que nos ciega o es la ausencia de todo dejándonos una página vacía.