Frente a frente dos empresarios; uno, de cepa queretana con un negocio que está por cumplir 70 años de tradición y que hoy, se mantiene cerrado en su estatus de cantina-restaurante; el segundo, avecindado en la capital desde hace seis años, y abocado al modelo de la franquicia.
“Cabemos todos”, coincidieron de inicio, en una charla llevada a cabo en la señal de SM radio, cuando el fin fue revisar alianzas productivas en medio de la contingencia sanitaria y económica.

Un privilegio conocer el pensamiento de Daniel Pérez, integrante del Consejo de la Asociación Nacional de Empresarios Turísticos y de Entretenimiento en Querétaro, y quien continua con la tradición del negocio, El Rinconcito Cantina-Bar; así como de Gabriel Sandoval, vicepresidente de franquicias de Canirac Querétaro y director de Grupo Concepto y TV Franquicias.

Ambos, despojados de todo marcaje que impone la cuna de origen, coincidieron que frente a la dificultad hay que sumar para hacer grande al estado. “Queremos nichos de mercados y negocios rentables para todos”, apuntó Daniel Pérez.

Un pacto social, que derive en la primera alianza productiva.

Gabriel Sandoval, visualiza la conveniencia de que la sociedad en Querétaro reactive su vida económica a través de un “Pacto Social” que sea el inicio de la primera y obligada alianza, la de una sana convivencia. Vaticino que solo así, será una sinergia en la entidad que alcanzará para todos. “Un pacto social desde la salud” y así estará en salvaguarda la recuperación económica del estado, aseguró.
El heredero de un negocio tradicional que se mantiene “contra viento y marea”, en el desarrollo propio de un esquema independiente, Daniel Pérez, no descarta pese a las siete décadas de su historia, que su lugar pueda tener como primera alianza postcovid, el crecer ahora como franquicia.

Debemos reinventarnos, aceptó, “sobrevivir y sobresalir” y así, reveló que identificado su lugar como la capital de las quesadillas de “copete”, que es la principal botana que ofrece, decidió vender este suculento bocado ahora en pizza para llevar, ante el cierre de su cantina.

Gabriel, acotó por su parte, que en las cámaras empresariales del estado no hay desesperación por la crisis y sí acción. Admitió que buena parte de los negocios no tienen cultura financiera y de planeación, “viven del flujo en efectivo, y no hubo capital que les respaldará”. Hoy, en la normalidad que deberá vivirse a diario, la disciplina fiscal y con ello, la formalidad de las empresas dará la felicidad a sus propietarios, dijo.

Los restaurante en Querétaro ven en la franquicia una alianza obligada.

El vicepresidente en Canirac Querétaro, reveló que por los menos una decena de restaurantes tradicionales como el 1810, y de recién apertura, ya preparan su desarrollo como franquicia. Es el sistema más eficiente, “pues su columna vertebral es un contrato y sin planeación financiera no puede haber una franquicia”. De paso, confió que el Bajío seguirá siendo la Joya de la franquicia a nivel nacional.

Daniel Pérez, otorgó la primicia a este espacio, crearemos la primera Asociación de Cantinas Tradicionales de Querétaro, en principio con 30 de ellas y una pulquería tradicional también. Decidimos evolucionar, descubriendo la esencia del negocio en una alianza comercial que termine con la ignorancia. “Sobrevivir y la confianza, será el nombre del juego, pues no veremos sino hasta julio del 2021 un restaurante sin limitaciones en su accionar”, consideró.

Animó el momento, al recordar que fuimos creados para convivir y que ello, es indispensable para la salud mental de la sociedad. Por su parte, Gabriel Sandoval, recomendó a no esperar “que el agua llegue al cuello” y buscar alianzas con los arrendadores. Así, fijó otro tipo de alianza, “negociar y pagar”.

El asesor legal, Fernando Pérez, alertó a los negocios en las tareas por venir, la renovación de contratos para un regreso responsable. Cobrará suma importancia los acuerdos de confidencialidad, por ejemplo.

No morir, hagamos lo necesario para formar alianzas y sobrevivir, fue su llamado, al tiempo que ambos personajes se pronunciaron por no “desbocarnos como sociedad”. Salgamos adelante, pues en Querétaro cabemos todos, pues su población es trabajadora y gusta de los retos, finalizaron.