La directora del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), María Elena Álvarez-Buylla, se reunió con representantes de los Centros Públicos de Investigación (CPI's) para pedirles que entreguen al órgano central sus propuestas de administración de recursos.

La titular del consejo dijo en la Reunión de Estrategias de Trabajo Conacyt-CPI's que tales recomendaciones deben garantizar las funciones sustantivas de los 26 centros de investigación.

Juan Méndez Nonell, director general del Centro de Investigación en Materiales Avanzados (CIMAV) y vocero de los directores de CPI’s, expresó que los directores están en la mejor disposición de acoger el liderazgo de Álvarez-Buylla, como cabeza de sector, se indicó en un comunicado.

La titular de Conacyt dijo que en breve se publicará la Convocatoria de Ciencia Básica, en la que se considerarán tres modalidades: la primera, concebida para proyectos pequeños; la segunda, para grupos de investigación más consolidados y que cuenten con al menos dos colaboradores y, la tercera, con bolsas más grandes para proyectos de investigación de frontera que establezcan sinergias más complejas y acuerdos de colaboración interinstitucionales.

Álvarez-Buylla pidió a los representantes de los CPI's participar en el Plan Nacional de Apropiación Social, al que consideró uno de los ejes rectores del "nuevo Conacyt". Con esto se pretende la divulgación en publicaciones conjuntas, el desarrollo de espacios como jardines etnobiológicos y museos comunitarios.

La situación de los Centros Públicos de Investigación ha preocupado a la comunidad pues se ha asegurado que no tienen para pagar los servicios elementales. En el Instituto de Ecología se han visto forzados a implementar medidas como terminar la jornada laboral a las 18 horas para ahorrar energía, así como cancelar el uso de aire acondicionado.

La situación antes mencionada ha sido similar al del Centro de Investigación de Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco, donde finalizan sus actividades a las 17 horas y se suspendió el uso de cafeteras eléctricas en la institución y se restringió el "uso de equipos de cómputo a estudiantes de servicio social".

En el Instituto Mora la situación ha sido preocupante pues las medidas de austeridad implicarían para el Instituto la salida de 30 prestadores de servicios profesionales; la limitación de recursos para contratar profesores externos en el segundo semestre; la reducción en 50% de sus publicaciones impresas, y el despido de 20% de sus mandos medios: un director y cuatro coordinadores de área.

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