El pronóstico de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para la temporada de huracanes de este año es que habrá al menos 32 que pegaran en ambas costas; la temporada en el Océano Pacífico inició el 15 de mayo pero en el Oceáno Atlántico ocurrirá el 1 de junio, las expectativas es que concluirán a más tardar el 30 de noviembre.

Las previsiones son que habrá 14 ciclones en el Océano Pacífico y 18 ciclones en el Océano Atlántico y hasta ahora no se han determinado las magnitudes de éstos, sin embargo, los estados que mayores precauciones tienen son Chiapas, Tabasco y Oaxaca, según la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

En el Plan de Atención de Huracanes para el presente año se establece que la CFE se debe de coordinar con otras dependencias para poder afrontar de manera conjunta las contingencias derivadas de la temporada de lluvias.

De acuerdo con el proyecto presentado por la CFE, uno de los puntos básicos para poder enfrentar los daños generados por los impactos de los fenómenos meteorológicos es tener asegurado el abasto de combustibles para las centrales de generación de la CFE, específicamente de gas natural y combustóleo, o diésel y carbón en el caso de Oaxaca.

La CFE señala que se realizarán diversas acciones necesarias para garantizar el suministro de combustibles y así poder mantener la continuidad de generación del Sistema Eléctrico Nacional.

El plan nacional tiene a su vez derivaciones estatales, planes de contingencia especiales para los diferentes estados donde se tienen mayores riesgos, como es el caso de Tabasco donde se concentran los mayores riesgos derivados de los invasiones de los derechos de paso y es donde hay la mayor cantidad de electricidad generada por agua.

Las situaciones especiales se tienen determinadas en Chiapas y Tabasco y las prioridades en ambos casos son para reanudad el servicio eléctrico en el menor tiempo y trabajar de manera conjunta con los servicios de seguridad social, gobierno y protección civil.

Una de las metas que se tiene es que se pueda reestablecer 95% del servicio perdido en un lapso menor a los cinco días si hay huracán.

El orden fijado en el programa de recuperación de desastres es el siguiente: servicios médicos de emergencia (hospitales públicos y privados y clínicas) sistemas de agua potable, comunicaciones y estaciones de Pemex, después casas habitación y al final negocios, firmas y comercios.

Los planes de contingencia de la CFE deberán contar con el apoyo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y de gobiernos estatales porque las presas más grandes del país son operadas por el organismo.

Se establecen los protocolos y la planeación de los operativos que la empresa realizará de manera previa, durante y posteriormente a un huracán, con el objetivo de restablecer el servicio eléctrico en el menor tiempo posible

El director de la CFE, Francisco Rojas, dijo que ante el inicio de la temporada de huracanes están listos para atender las zonas donde estos fenómenos naturales pudieran ocasionar afectaciones a la estructura eléctrica.

El Plan de Atención de Huracanes de la CFE contempla acciones previas, durante la presencia del meteoro, de restablecimiento y reconstrucción.

Las acciones previas a un huracán que se tienen son las siguientes: identificación de instalaciones eléctricas que pueden verse afectadas, como centrales de generación, torres de transmisión, líneas de alta, media y baja tensión, subestaciones y postes.

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