Jabalí es un proyecto de autodescubrimiento y aceptación, su música es una conexión de dos vías con el mundo y una herramienta para entender quiénes somos, lo que nos mueve, lo que nos duele y lo que nos hace felices. 
La banda nace en  2003, cuando Fernando Laureano y Adrián Cogordan se conocen en la CDMX, donde comenzaron a tocar en bares y fiestas. Y, para variar, nos aventamos la charla con los miembros del grupo y platicamos sobre el nuevo material y  2023.

¿Qué es Jabalí y quienes forman a la banda?

—Hoy en día, Jabalí es una banda que representa un regreso y la oportunidad de construir algo nuevo. Las canciones que estamos lanzando en este primer disco, Aviéntate, son composiciones que escribimos hace algunos años, por lo tanto este álbum marca nuestro retorno al lugar donde dejamos algo pendiente. Jabalí representa tanto el cierre de un ciclo como el inicio de otro del cual estamos muy emocionados. La alineación actual de Jabalí incluye a los integrantes originales: el baterista Adrián Cogordan, el bajista Fernando Virueta y a mí, Fernando Laureano, en voz y guitarra y además cuenta con la colaboración del maestro Tato Schab en guitarra solista, y al tecladista Leonardo Erazo. Este formato nos permite colaborar con diversos músicos, por ejemplo, para este disco, los bajos fueron grabados por Lu Salinas, del grupo QBO.

“Sus primeros pasos fueron interpretando covers, al igual que muchas bandas, para el siguiente año, Mateo Rodríguez se incorporó a la banda, al poco tiempo de iniciar el proyecto, Mateo invitó a la agrupación a Fernando Virrueta, y es aquí cuando comenzaron a componer su propia música”

Presentan  “Chilango”, un tema que nace de vivencias en la CDMX, que va lleno de experiencias de vida...

—Sí, así es, definitivamente esta canción está inspirada un poco por el shock que algunas personas tenemos cuando nos mudamos de otras partes del país a la Ciudad de México. En mi caso, yo me mudé de Guadalajara a la Ciudad de México para estudiar y hubo dos situaciones en particular que sirvieron como inspiración para esta canción, una de ellas fue un choque con un microbús, cuando yo me bajé a platicar con el conductor sobre lo que había pasado, él nada más se  volteó y se fue. A él no le había pasado nada, yo tenía un cochecito tipo chevy y estaba todo abollado, aunque en ese momento me causó frustración, sobre ese evento creamos un personaje o un arquetipo del conductor de microbús que está proyectado en la canción. Otra cosa que también me impresionó fue cuando el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador tomó posesión del Paseo de la Reforma cuando perdió en sus primeras elecciones presidenciales y yo recuerdo haber estado caminando sobre Reforma entre la gente que estaba viviendo ahí en la calle, en casas de campaña, por dirección del aquel entonces jefe de Gobierno. Y al final, la canción también habla de cómo la ciudad nos transforma de alguna manera. Yo creo que todos somos producto de nuestro ambiente y sin duda el lugar en el que estás viviendo moldea quién eres.

¿Qué viene para lo que resta de 2023?

—Durante el resto de este año, nos enfocaremos en tres cosas principalmente: en primer lugar, estamos trabajando para finalizar la producción del disco Aviéntate, que contendrá nueve canciones y tenemos como objetivo publicarlo a finales de agosto, con el primer sencillo “Chilango” en todas las plataformas digitales desde este 16 de junio. En segundo lugar, queremos enfocarnos en tocar en vivo, algo que realmente disfrutamos. Esperamos poder realizar algunos shows en varias ciudades del país durante la última parte del año. Por último, queremos seguir componiendo nuevas canciones y nos centraremos en el trabajo de composición para sentar las bases de lo que podría ser el segundo disco de Jabalí en el 2024.

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