Con la presencia de Rafael Perrín y Carlos Bracho, la estación Metro Garibaldi inauguró ayer la exposición La Dama de negro, que a través de imágenes, objetos, vestuario y placas mostrará al público las piezas más emblemáticas de la puesta en escena a lo largo de sus 20 años de vida.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Perrín aseguró que La dama de negro ya dejó de ser una obra de teatro hace mucho tiempo para convertirse en algo de la ciudad de México y del país, y es por eso que el Metro es el lugar ideal para la muestra.

“Cuando develamos la figura de cera, Ebrard dijo que se hizo un estudio de los diez puntos de interés de visita de la gente y uno era La dama de negro, junto con las pirámides, la Basílica y la Catedral”, señaló.

Sin poder concebir el éxito de esta obra que aborda el terror a lo largo de tantos años y que consigue buen aforo durante sus giras por el interior de la república, el director teatral platicó que ahora está en una de sus mejores etapas. “Pero también cuando empezamos con Germán Robles (actor que protagonizó la primera temporada) era una locura, él es un hombre que puso un sello y que es la columna vertebral de La dama de Negro, indudablemente esta es una etapa muy gratificante para nosotros”.

Preparados para celebrar en febrero los 21 años de La Dama, Rafael adelantó que Antonio Calvo (productor) prepara grandes sorpresas para los amantes del montaje y por lo menos, buscan estar en teatros durante todo el 2015 incluyendo su gira nacional.

La exposición se quedará en Garibaldi hasta diciembre y posteriormente se volverá itinerante dentro del sistema de transporte.

El actor, platicó el origen de algunos de los objetos presentes. “Este fue el primer baúl que hubo en La dama de negro. Germán Robles y yo nos sentábamos en él el día del estreno. Éste (señalando hacia el cristal) fue el primer quinqué que yo usé y este el primer muñeco Pinocho que utilizamos que ya no tiene nariz pero yo quise guardarlo porque es el primero”.

Sustos de la vida real. Rafael Perrín platicó el susto más feo y el más reciente que se han llevado y que ocurrió hace un par de semanas apenas. “El peor susto que nos hemos llevado nos fue justamente en Zacatecas. En la obra usamos un caballito de madera y hay un momento en el que se mueve una mecedora pero es un truco de magia de nosotros. El caballito no se mueve. En eso, nosotros movemos el caballito, lo detenemos pero el caballito se comienza a mover solo... y se vuelve a mover”.

Durante la inauguración, el público se tomó fotos con Carlos Bracho, quien aseguró que es el Metro el mejor lugar para la muestra.

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