De poco le ha servido al Partido Acción Nacional (PAN) sumar en la presente elección a los restos del PRI y del PRD; salvo en un par de estados, estos partidos no le han abonado nada a la oposición que encabezan los blanquiazules, al contrario, tanto los tricolores como los del sol azteca traen en sus filas a lo más detestable de la clase política mexicana, desafortunadamente varios especímenes de ese barco se han mudado a Morena, tratando de contaminar un partido movimiento qué ha transformado la vida público de México.

Los cercanos a Xóchitl ven como la hora cero el debate del domingo próximo, si no hace un buen papel y las preferencias del electorado no cambian en lo mínimo, la lucha por la silla presidencial será abandonada y sus esfuerzos y dinero serán enfocados a buscar desbancar la inercia de Clara Brugada en la Ciudad de México para reforzar en esta última etapa la figura de Santiago Taboada, quien hasta hace poco era alcalde de Benito Juárez y que hoy en día es plenamente identificado como una de las cabezas del Cartel Inmobiliario que pretende tomar por asalto la capital del país.

Este escalofrío recorre varias entidades y las reacciones de los representantes del Frente han dejado de ser vulgares y ordinarias, para convertirse en violentas e intolerantes, no me sorprende, las raíces del PAN están remojadas en las aguas negras del fascismo, su filosofía no logra concebir una sociedad plural, moderna, progresista, donde la ciudadanía sea la principal protagonista de la vida de un país, donde las pequeñas camarillas de poder no tengan la capacidad de modificar el rumbo de la nación en un plumazo y donde el pueblo organizado es el principal responsable de su presente y futuro.

Querétaro no ha sido la excepción, la guerra sucia en contra del doctor Herrera no es algo reciente, su persona siempre ha representado una amenaza a los que se asumen como dueños de nuestro estado, desde su etapa como rector de la Universidad Autónoma de Querétaro ha tenido que librar batallas importantes por defender lo justo y lo digno, la historia no cambió al llegar al Senado de la República y más de un actor conservador ha intentado manchar el trabajo y legado del doctor, sin haber tenido éxito alguno, no cabe duda su incansable trabajo por las juventudes y por los que históricamente han sido ignorados, son su principal respaldo como servidor público como un convencido de que la educación es un motor de transformación social.

Ante la fortaleza de Morena y del doctor Gilberto, los “operadores” oficialistas inician con la compra descarada del voto, amenazan a través de sus liderazgos a compañeras y compañeros que hoy en día se encuentran compitiendo por un cargo de representación popular y, por si no fuera suficiente, han llegado al punto de la violencia física con tal de inhibir el trabajo de concientización y promoción de las y los morenistas. ¿Este es acaso el “orden” del que habla el candidato azul a la capital? Su idea del orden pinta más a una bandera intolerante que a una convicción de poner en su lugar todo lo que sus compañeros de partido han destruido cuando pasaron por la administración municipal.

Tiempo al tiempo, Querétaro ya despertó.

Google News