A través de páginas de internet y Facebook diversos grupos invitan a las mujeres a participar en cursos gratuitos de defensa personal para darles herramientas que les permitan reaccionar ante situaciones de riesgo.

Una de las organizadoras de dichas publicaciones aclara que no se trata de generar alarma, sino de reconocer la necesidad de formar a las mujeres dentro de la prevención y la posibilidad de defenderse ante situaciones para las que deben estar alertas.

Algunos de los cursos gratuitos se ofrecen en sitios como el parque Querétaro 2000, entre otros.

Para las participantes en estas actividades existe una urgencia por capacitarse en la autodefensa y en estar alerta ante situaciones de riesgo, identificar signos de peligro, porque los asaltos o las violaciones “ocurren en minutos”, comentan.

La activista Cinthya Casarrubias, quien organizó uno de estos talleres gratuitos en el primer trimestre del año, como parte del festival Mujeres en las Calles, resaltó que este esfuerzo forma parte de una demanda por exigir libertad y seguridad para mujeres y niñas en los espacios públicos.

Al taller de marzo pasado, que se realizó en la colonia La Era, acudieron más de 20 personas, entre ellas niñas desde los seis años de edad y mujeres de más de 60, así como algunos padres de familia preocupados porque sus hijas e hijos aprendieran a cuidarse.

Las preocupaciones en aquel momento eran que a las niñas o a las jóvenes las quisieran subir a un auto o que las intentaran asaltar o atacar.

“Una violación se puede concretar en dos minutos, quitarte la ropa dura segundos, un asalto es rápido y hay señales a las que debes estar atenta. Nos enseñaron técnica, teoría y práctica, pero fue muy poderoso para los participantes, pudimos ver cómo les cambiaba su propia autoimagen de lo que podían hacer”, recordó Cinthya.

El taller respondió a que en esas fechas hubo una percepción de aumento en la inseguridad, así que muchas mujeres demandaron capacitación, así como para niñas y niños.

A dos niños los habían asaltado a unos pasos de su escuela, en pleno día. Había una niña muy delgadita y fue muy notorio el cambio de su actitud antes y después del taller, ya sabía que se podía defender y cómo podía hacerlo”, expresó Cinthya.

Parte del autocuidado inicia con cuestiones sencillas, como informar en dónde están, incluso cuando hay un pleito familiar. Traer el celular con crédito y batería para comunicarse, tener algo de dinero para transporte.

“Se hizo mucho hincapié en que hay que avisarle a la gente cercana a uno cuándo vas a regresar o por lo menos avisar en dónde estás”.

Con 2 mil 707 miembros, el grupo de la red social “Ni una menos, creando comunidad”, ofrece información sobre qué es el acoso callejero, cómo defenderse, así como recursos informativos para formarse en una cultura de respeto mutuo y el autocuidado.

En su propia descripción, el grupo afirma que su finalidad es ayudar a la capacitación en la defensa personal para los grupos más vulnerables, por lo que organizó varios cursos de autodefensa personal.

Entre las administradoras del grupo se encuentra Yaz Contreras, también defensora del autocuidado, para quien este tema debería ser prioridad para la población abierta.

Uno de los retos es lograr que las mujeres se sientan seguras en los espacios públicos, cuando transitan por la calle o van en el camión y para eso se requiere que todas las personas se comporten con respeto en esos sitios, pero en caso de que no lo hagan, se necesita que las niñas y mujeres “se sientan firmes y poderosas para defenderse con las herramientas adecuadas”, según afirmó Cinthya.

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