Derivado del estudio sobre transporte público a nivel nacional, que realizó hace algunos meses la asociación civil ubicada en San Luis Potosí, Ciudadanos Observando, su fundador y vocero, José González, afirmó que el transporte en el país sufre de grandes rezagos y problemáticas que no serán fáciles de resolver si el asunto sigue en función de los intereses políticos, que en la mayoría de los casos, frena la modernización.

“Por desgracia, el problema del transporte no es un tema exclusivo de México, es casi mundial, especialmente dentro de los países latinoamericanos donde se mezclan fuertes intereses políticos que no permiten avanzar en el tema. Por desgracia, quien impide que las mejoras al transporte se lleven a cabo es la mafia del pulpo camionero, por ejemplo, aquí en San Luis Potosí está secuestrada, y como ellos le meten dinero a las campañas políticas de todos los partidos, pues llegue quien llegue, terminan pagándoles los favores”.

Señaló que esta dinámica ha creado un círculo vicioso que genera varios problemas colaterales, como es el aumento de la contaminación atmosférica en las urbes del país, debido al mal estado y a la falta de mantenimiento de las unidades de transporte.

“La contaminación que generan los autobuses en mal estado es un problema grave, por otra parte la ciudadanía no tiene otra opción para transportarse. El gobierno debe trabajar para tener alternativas para transportar a la gente, como tranvías, metro, metrobús”.

Resaltó que como resultado del estudio que realizaron se dieron cuenta de la poca capacitación que reciben los conductores a nivel nacional, quienes muchas veces son obligados a trabajar hasta 18 horas diarias sin las prestaciones que otorga la ley.

Problemas con choferes. “Hemos encontrado casos donde los choferes son obligados hasta trabajar 18 horas continuas, esto es hasta un tema de derechos humanos. Varios choferes nos denunciaron que hasta les tienen prohibido detenerse hasta para ir al baño, y eso no sólo sucede en San Luis, hemos encontrado casos similares en otras partes del país y esto, obviamente, tiene como consecuencia un muy mal servicio al usuario”

En cuanto a la relación costo-beneficio y calidad del servicio que se ofrece en ciudades como Guadalajara, Monterrey, Distrito Federal, José González quiso resaltar el caso de León, Guanajuato, donde la tarifa en el servicio público es de nueve pesos.

“En concreto, en León si tú ves la tarifa, en teoría esa es la más cara del país dentro de la zona B del salario mínimo, pero no es así, de entrada la calidad de las orugas [autobuses] así como las estaciones es muy diferente. Pero con los nueve pesos tienes la oportunidad de darle la vuelta a toda la ciudad, es decir, puedes transbordar, lo que quiere decir que te bajas en una estación, puedes hacer tus compras o alguna actividad y si transcurre menos de una hora, puedes volver a utilizar el camión con el mismo costo, además todas las personas mayores de 65 años, no pagan”.

Destacó también el caso del metrobús de la ciudad de México, donde el costo de un viaje asciende a los 5.50 pesos con recorridos mucho más largos que en otras ciudades pequeñas.

“Aquí podemos ver que las unidades son ecológicas; en Monterrey metieron unidades nuevas que traen aire acondicionado y internet”.

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