Los trámites para denunciar baches y daños a las avenidas se reducirán en su tiempo de espera, pasando de un año, a mes y medio, a través de una iniciativa para la reforma del código municipal, informó el regidor, José Luis Aguilera Rico.

Comentó que de mil demandas acumuladas en los últimos dos años, solo 5% de los procesos avanzan. Aseguró que por lo tardado de los procesos jurídicos del municipio, es que los ciudadanos no pueden avalar el daño de sus vehículos como una llanta ponchada, un rin descompuesto o el chasis.

“Presentamos una propuesta que va a dar respuesta a la sociedad queretana en el tema de los baches, aquellos que cuentan con sus vehículos dañados por caer en un bache y que no tienen con quien desquitarse”, expresó el regidor.

Aguilera Rico explicó que lo que se busca con esta propuesta es que la Secretaría de Desarrollo Sustentable, por medio de la Dirección de Desarrollo Urbano, tenga la posibilidad de recibir a todos los demandantes por daños a sus vehículos ocasionados por las fisuras en el pavimento.

De acuerdo con datos municipales, se conoce que 90% de los vehículos circulan por vialidades municipales, primarias y secundarias, que necesitan reparaciones, situación acentuada en temporada de lluvias.

“Los vehículos de los ciudadanos sufren daños por los accidentes que ocasionan los baches, y no tienen a donde acudir. Actualmente hay trámites muy largos que se realizan en el Tribunal, donde los juicios son muy extensos”, mencionó.

Con esta reforma se agilizarían los trámites para que el ciudadano obtuviera de 5 mil a 8 mil pesos por la lesión con la que cuenta su vehículo, en caso de que no se haya dado mantenimiento a la vialidad que presenta daños en la carpeta asfáltica.

“Esto nos ocurre de manera constante al momento en que se presentan lluvias en la capital, particularmente en esta temporada se incrementan mucho las demandas y el ciudadano no sabe a donde acudir”, mencionó Aguilera Rico.

Solicitudes de pagos

El año pasado, en los primeros nueve meses, se recibieron 49 solicitudes de pagos por parte de ciudadanos que habían sufrido daños en sus vehículos luego de caer en un bache que no había sido reparado por la dependencia de obras correspondiente.

En ese entonces, se informó que de las solicitudes, 85.71% fueron procedentes y el conductor recibió el pago correspondiente; sin embargo en siete casos no se concretó el pago.

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