La agrupación Yoky Barrios y El Barragán son reconocidos por su gran trayectoria musical y sus aportes al rap colombiano. Su vocalista, además, destaca por ser uno de los mejores escritores y cantantes del hip hop latinoamericano y en una charla aderezada con café colombiano, nos platica de lo que viene con “Cura y Enfermedad”, su nuevo tema.

¿Cuál es tu historia en la música?

—Pollo Rock,  un placer, llevo más de 20 años haciendo música, transformando realidades a través del arte, a través de las letras y a través del rap. Soy músico de Colombia, bogotano, procedente de un barrio popular de Bogotá llamado Usme, compositor e intérprete; comencé mi carrera en 1998, (gracias a mi madre y su gusto por Vico C) y a la fecha he publicado tres trabajos discográficos, mi música ha estado en diferentes series de Netflix como Distrito Salvaje, también he estado en cine con la película Somos Calentura e hice una canción hace 15 años que se llama “Amigos” y se convirtió en himno en los colegios, tema que la revista Rolling Stone destacó entre las 20 canciones más importantes del hip hop colombiano. También trabajo mucho con las comunidades, aprovechando el arte como transformador social.

La estás rompiendo  con  “Cura y Enfermedad”, en colaboración con Apache...

—Gracias a Dios seguimos creciendo... uno de los países donde más nos escuchan es en México, incluso más que en Colombia y qué maravilla la aceptación que ha tenido mi música. Bueno, a Apache lo conocí porque hicimos una canción para una marca de cerveza, hubo química musical y personal a primera vista; fue algo muy orgánico que nació. Un día le dije: “tengo una propuesta, quiero que metas tu fraseo a la canción”, y así se dió la colaboración con él. Apache es un artista muy importante del hip hop latinoamericano a quien admiro profundamente.

El video lo grabamos en Medellín, lo dirigió mi hermano Juan Pablo Barragán. La ciudad actuó como punto de encuentro de culturas... un colombiano (bogotano), un venezolano en una ciudad que nos acoge para la creación.

Hoy Medellín es epicentro de movidas culturales y elegimos su color, elegimos el Salón Málaga, un sitio muy importante y el centro de la ciudad para retratar la historia de la canción.

Es un tema  que reconoce el grado del afecto, de extrañar momentos, del  dolor  que se siente cuando se está lejos de la persona que se ama,  ¿qué inspira la composición?

—Es una canción de subidas y bajadas, que reconoce que no todo es bello en las relaciones entre los seres humanos, que como hay enfermedades hay cura y que siempre hay cura. Quiero que todo sea bonito a través de la música. Habla de la importancia de reconocer cuando a uno le duele estar lejos de otra persona, reconocer cuando se obra mal, reconocer los errores y la canción da a entender que el amor no es fácil... porque todos queremos felicidad, pero el amor es sal y azúcar. La canción tiene además de dembow lento, ritmos de folclor colombiano, como la marimba para que dé ganas de bailar, por eso lo hicimos en Medellín, por el color y la estética de Medellín que nos encanta.

¿Planes para cerrar el año? 

—Se viene una canción de “afrodespecho”,  una fusión de sonidos afro con despecho con un artista de música popular y muy importante de Colombia, eso será una sorpresa y otro paso más a la exploración de sonidos alrededor del rap y el hip hop, además, estaremos en Altavoz Fest Internacional en Medellín.

¿Redes sociales?

—Bueno, pues me pueden encontrar en todas las redes sociales y plataformas como Yoky Barrios, queremos que conozcan otra ventana de la realidad a través del rap y el hip hop.

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