Del 3 al 5 de mayo se vivirá Con el son en el corazón, Huapangos para alegrar la vida en tiempos de pandemia, evento en línea para dar difusión al huapango, tradición cultural de la huasteca y la Sierra Gorda.
A través de la Secretaría de Cultura del Estado de Querétaro se presentarán 18 videos, con 12 son conciertos, cuatro talleres y dos documentales, donde participan 75 artistas de los municipios de Arroyo Seco, Pinal de Amoles, San Joaquín, Landa de Matamoros, Jalpan de Serra, Peñamiller y Tolimán.
La vigencia y permanencia de estas músicas tradicionales se refleja en el rito de la fiesta popular, en donde todos participan: los músicos interpretando huapangos, haciendo gala del “falsete” y del verso improvisado acompañados de los acordes del violín, la jarana y la guitarra huapanguera; los bailadores haciendo vibrar la tarima, los demás disfrutando del momento fugaz de la vida en un acto comunitario.
Querétaro tiene dos variantes del son mexicano: el huapango huasteco y el huapango arribeño, este último suele considerarse equivocadamente como una variante del huapango huasteco, su base instrumental son dos violines, vihuela y guitarra “leona”, además de su rica y compleja estructura musical y la gran diversidad de moldes poéticos lo constituyen en una expresión única de la cultura popular.
La máxima expresión del huapango arribeño es la “topada”, tenzón poética entre dos conjuntos arribeños que suele durar hasta el amanecer, y en el que los poetas se “confrontan” abordando temas de cultura general, las preocupaciones de la vida, del momento…su discurso versa sobre la “seca”, la migración, la economía, la corrupción y los malos gobiernos. Redacción
