“A través del tiempo he tenido la oportunidad de comprobar que en Rioja ninguna añada es igual a otra, aunque desde luego todas tienen una conexión: la frutalidad del Tempranillo, siempre aderezada con estructura y elegancia. Esas son precisamente las características que buscamos presentar en nuestros vinos,” advierte la enóloga Vanesa Insausti, responsable técnica de la bodega ubicada en Rioja Alavesa en el marco de su reciente visita a México.

"Hablamos de vinos cuya mayor particularidad es la expresión de los frutos rojos. Es una diferencia relevante si consideramos el marco tradicional de los tintos clásicos, con una marcada presencia de aromas a madera, característicos de los vinos de la región. Esa frutalidad es una insignia que queremos exaltar y que nos muestra un rostro diferente de la zona, pero siempre con rasgos indiscutibles de identidad," refiere Insausti.

Ubicada en las faldas de la Sierra de Cantabria, la bodega Solar Viejo fue fundada en 1937. En 2004 fue adquirida por grupo Freixenet. Actualmente produce más de tres millones de botellas al año dentro de la Denominación de Origen Calificada (DOCa) Rioja. Su nombre se debe a que fue establecida en una de las más emblemáticas casas solariegas de Laguardia, dentro del recinto amurallado de la villa. Fue ahí donde comenzó a elaborarse el primer Solar Viejo, el vino más representativo de la bodega.

Insausti, quien trabaja en Solar Viejo desde 2007 y pertenece al distinguido grupo de mujeres enólogas que actualmente marca la pauta en las bodegas de la DOCa, resalta que en la actualidad se elaboran vinos con una personalidad riojana de gran calidad, que buscan darse a conocer con un estilo más joven, más frutal, con más frescura y facilidad para beber.

"La viticultura moderna,” explica la enóloga, “va enfocada a obtener este estilo de vinos con uvas perfectamente vendimiadas en su madurez; además de que se trata de una vinicultura sumamente bien cuidada, donde nunca se pierde el origen frutal."

Agrega que Rioja mantiene su condición y compromiso de ser la primera DO que salió de España hacia los mercados internacionales: "vivimos una revolución y evolución en nuestro estilo y, aunque el sistema mantiene muchas tradiciones, se reconocen las tendencias mundiales.

“Quiero reflejar en Solar Viejo el fuerte carácter vinícola de Rioja, inconfundible, como mi primer recuerdo: el olor a vino del primer lagar que vi cuando era pequeña. En ese entonces tenía cinco años y todavía no era consciente de que el vino sería una parte fundamental en mi vida. Este es un recuerdo, un momento especial, que me acompañará a lo largo de toda mi experiencia personal y profesional," resalta.

En el caso del vino Solar Viejo, explica, la uva que más se planta es la Tempranillo: "90 por ciento de los vinos tintos que elaboramos están hechos con esta vid y el 10 por ciento corresponde a vino blanco. Otra de las uvas que también usamos es la Graciano, la cual le aporta mayor capacidad de envejecimiento a los caldos."

Para disfrutar en México

Entre los vinos disponibles en México se encuentran Solar Viejo Tempranillo 2013, un tinto monovarietal "fácil de beber, concebido para sustituir el refresco, la cerveza y el Lambrusco; porque es seco, con un ligero sabor dulce que acompaña sin problema los alimentos.”

Otro de los caldos disponibles es Solar Viejo Crianza 2011. “Este año está considerado como uno de los mejores de vendimia por la región riojana, por ello este vino es espectacular, bien estructurado y potente. Tiene aromas a café y especias, aunque perdura la frutalidad y la madera. Creemos que es atractivo al consumidor que la fruta esté presente.”

También destaca Solar Viejo Reserva 2008, compuesto por 85 por ciento Tempranillo y 15 de Graciano, cuyas uvas proceden de viñedos de más de 40 años de vida. “La cepa Graciano le otorga tanicidad y longevidad, además de aromas más florales que frutales. Es un vino que marida perfecto con la comida mexicana por sus aromas a frutas negras y especias. Se diferencia de otros Reserva porque conserva su color rojo granate, pero sin llegar a perder su brillantez, debido a que no se deja que el vino evolucione en botella.”

Finalmente, la enóloga explicó que a su paso por distintas bodegas ha podido descubrir qué es y cómo se elabora un Tempranillo de Rioja en sus diferentes zonas. “La elegancia de Rioja Alta la descubrí en Briones, la intensidad de color la encontré en la zona de la Rioja Baja y no me dejo de sorprender a diario con los aromas afrutados y la estructura que aporta Rioja Alavesa," precisa Vanesa Insausti.

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