El presentador y especialista en vida salvaje, Paul Rosolie, sobrevivió a ser tragado por una anaconda, según pudo verse en un polémico documental de dos horas que se emitió el domingo en Estados Unidos, a través de la señal de Discovery Channel.
También el animal resultó ileso luego de la temeraria acción de Rosolie, quien con este material trata de alertar sobre la deforestación del Amazonas.
En Eaten Alive (Tragado Vivo) el especialista portó un traje especial y se untó sangre animal para atraer la atención de la anaconda de seis metros.
Luego de algunos minutos dentro del animal, Rosolie fue auxiliado, pues la presión que la anaconda ejercía le hizo temer que le rompiera los huesos y finalmente salió.
Sin embargo, en cuanto terminó el programa, activistas ambientales denunciaron una serie de anomalías que observaron durante el documental.
PETA, que desde antes había manifestado su escepticismo por el acto de Rosolie, emitió un comunicado: “Los animales mostrados en Eaten Alive fueron removidos de su hábitat natural en el agua y transportados a una locación de rodaje. Y la serpiente elegida fue obligada a usar su energía de reserva para tragar a una ser humano disfrazado de cerdo. Todo por un truco publicitario barato”.
En efecto, el público también notó que a diferencia de lo que se había anunciado, Rosolie no pudo hallar una anaconda en su hábitat natural, por lo que el equipo de producción tuvo que echar mano de una que estaba en cautiverio. “La serpiente resultó ser muy pequeña para devorar a Paul”, consigna el portal TMZ. Así que los televidentes usaron en Twitter para manifestar su frustración porque Rosolie no fue tragado por completo.
