Jason Beghe se divirtió mucho dando bofetadas a los críminales. “Tengo un mal temperamento y creo que golpear a las personas es algo catártico, no sé si lo sea para el otro, pero para mí si lo fue”, bromeó el protagonista de la serie Chicago P.D.

Con buen humor, el actor confesó que su personaje es sólo el resultado de una escala de grises que tiene la vida. “Podríamos decir que el detective Hank Voight está en un gris más oscuro aunque me gusta pensar que es bueno o malo, sino, simplemente, es un polícia efectivo”, dijo.

La nueva apuesta de Universal Channel, que se estrena el martes 13 a las 22:00 horas, es un spin off de Chicago Fire, serie protagonizada por Jesse Spencer y Taylor Kinney.

“Cuando me dijeron que querían hacer una serie tomando mi personaje como protagonista, les advertí a los guionistas que Hank no era uno que podría gustarle a todos”, comentó.

Y es que el sargento Voight es un polícia moralmente ambiguo que lo mismo hiere y gritonea a los delincuentes que a su propio equipo.

“Su intención es ser eficiente y hacer el bien, él se rige por su intención de detener a aquellos que lastiman a los niños o a personas inocentes. A veces usa métodos poco ortodoxos, pero creo que la mayoría lo justificamos cuando ven los resultados”, explicó.

Creada por Dick Wolf y Matt Olmstead, dos productores reconocidos por éxitos como La ley y el Orden y Miami Vice, la serie no sólo ha conseguido mantener su audiencia desde los primeros capítulos, sino que la ha incrementado llegando a un promedio de siete millones de televidentes.

Con una voz aguardientosa y su actitud de chico rudo, Beghe aseguró que retratar a este grupo de polícias de la Ciudad de Chicago es lo más divertido y complicado que le ha tocado hacer.

“Yo vivo en California, así que cuando estuvimos allá el frío nos olbligó a no salir, porque de lo contrario, los pulmones se nos hubieran congelado”.

Convencido de que su personaje no debe de ser juzgado como un mal policía, Beghe dijo que lo más importante de la serie será mostrar con honestidad el día a día de estos policías que en la vida real buscan hacer el bien y enfretarse a los malos.

“Muchos policías están en la cárcel por actuar como Hank lo hace, si está bien o está mal es otra cosa, pero creo que cada quien actúa en beneficio de las personas, yo sólo me preocupo por hacer un polícia eficaz”, finalizó.

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