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La Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer (AMANC) anunció la 16ava edición de su tradicional torneo de golf Por ti Michelle, que se realizará el 30 de noviembre en los campos del Club Campestre de Querétaro.
Durante una rueda de prensa, las organizadoras e integrantes de la asociación dieron a conocer que este año el donativo será de 2 mil 700 pesos por persona, y se espera la asistencia de 150 bastoneros y bastoneras, tanto profesionales como amateurs de todas las edades.
Se proyecta recaudar cerca de 700 mil pesos para beneficiar con alimentación, hospedaje, medicamentos, transporte, apoyo psicológico y otros servicios a 350 niños, niñas y adolescentes de bajos recursos que padecen cáncer, provenientes en su mayoría de Querétaro, San Juan del Río y Pedro Escobedo, así como de San Luis Potosí, Guanajuato y el Estado de México.
La competencia arrancará a las 8:30 horas bajo el formato de juego threesome A go-go. Los primeros lugares de O’yes serán acreedores a premios que van desde un viaje de siete noches a Zihuatanejo, una estancia de cuatro días en Acapulco, dos noches en la Rivera Maya, hasta una permanencia de tres noches en Panamá. También se obsequiarán set de fierros, lap tops, electrodomésticos y pantallas planas para el segundo, tercero y cuarto lugar, en los hoyos 3, 8, 12 y 17.
Para los premios “Hole in one” serán destinados un auto JAC SEI2, patrocinado por Zapata Motors; un Volskwagen Gol del Grupo VAQCSA Querétaro; un carrito de golf auspiciado por Alesso Club Car; un reloj Raymond Weil y una estancia de Infogolf en Pichilingue Acapulco. Y por si fuera poco, en la comida de premiación habrán rifas y regalos especiales para todos los participantes.
AMANC Querétaro.
De acuerdo con la organización, cada mes se requieren 400 mil pesos para subvencionar los programas de atención integral, así como el nuevo proyecto de este año, con el que buscan dignificar los hogares de varias familias AMANC.
“Muchos de nuestros niños viven en pobreza extrema, y sus casas a veces se encuentran inhabitables: sin piso, ventanas e incluso sin techo, y como ustedes saben, mientras están en sus quimioterapias hay una deficiencia inmunológica enorme, por lo que muchos pueden padecer de complicaciones mortales sólo por no contar con una casa digna”, aseveró Ofelia Nassar, presidenta de AMANC, quien informó que la incidencia de cáncer en esta población, ha ido en aumento los últimos años en la entidad, registrándose dos casos nuevos cada semana, en el Hospital del Niño y la Mujer.
Este año AMANC ha beneficiado a 350 niños, niñas y adolescentes, siendo la leucemia aguda linfoblástica el tipo de cáncer más común, cuyo tratamiento anual, tan sólo en medicamentos, asciende a 500 mil pesos por cada paciente.
La historia de Diego.
“En AMANC me he sentido como en mi segunda casa”, compartió Olivia Hernández, mamá de Diego Uribe, un niño de ocho años quien el 7 de diciembre de 2017 fue diagnosticado con este padecimiento en el Hospital de especialidades del Niño y la Mujer.
“Cuando los ganglios se le inflamaron casi como una naranja yo sospeché que podría tratarse de un tumor, pero ni los doctores de los consultorios privados como del hospital general de San Juan del Río, le detectaban nada. Así que cuando el padecimiento comenzó a agravarse fue hasta entonces que se le trasladó al hospital del Niño y la Mujer en Querétaro, donde fue diagnosticado con leucemia linfoblástica de células T, una de las más agresivas”, lamentó la sanjuanense, y aseveró que desde que les dieron a ella y su esposo esta noticia, la dinámica familiar ha girado en torno a la enfermedad de su pequeño.
“Al saber de su enfermedad, él (Diego) me dijo ‘oye mamá, Joan Sebastian murió de cáncer, ¿verdad?’, ‘sí, pero de otro cáncer; el tuyo sí tiene cura hijo’, le dije para tranquilizarlo. Desde entonces, todo ha ido bien, sólo lo hemos hospitalizado dos veces por temperatura, ya que una vez que le aumente a 38 grados, hay que pegar la carrera al hospital”, platicó la madre.
Cada semana, la mujer viaja con su pequeño desde San Juan del Río hasta Querétaro para su seguimiento médico, trayecto en el que llega a gastar hasta 300 pesos, de ida y vuelta. No obstante, agradece el apoyo de AMANC, pues hay periodos en los que tienen que asistir todos los días al Hospital del Niño y la Mujer.
“Cuando me contacté con AMANC, la institución me ofreció apoyo para hospedaje y alimentación, incluso nos trasladan hasta el hospital cuando tenemos que ir a la consulta diaria”, comentó Olivia, quien además dijo sentirse afortunada por coincidir en la organización con otras madres, quienes como ella, han recibido apoyo psicológico y entre todas se han acompañado durante este proceso.
“En la casa de AMANC nos reciben sin distinción. Incluso Diego toma clases en este centro porque tuve que sacarlo de la escuela por el bullying; hay niños y papás que no son sensibles con su condición clínica, y le han puesto hasta apodos por los cambios físicos que sufre a causa del medicamento que debe tomar.
Pero allá está feliz, recibe cursos reconocidos por USEBEQ, y cuando no andamos acá, estamos en casa estudiando”, compartió junto a Diego, quien con una tímida sonrisa sin algunos dientes, afirmó que desea ser enfermero cuando crezca “para ayudar a otros niños como yo”.
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