Durante 23 años los hermanos Carlos y Jaime Maya Díaz han arrancado risas a niños y grandes con su show de payasos e imitación de personajes de la farándula.
Todo comenzó hace poco más de dos décadas, cuando los payasos contratados para una fiesta infantil nunca llegaron y ambos hermanos incursionaron en esta faceta. La celebración era por el cumpleaños del hijo de Carlos.
“Empezamos en la fiesta de su hijo —de mi sobrino—, él convocó a una fiesta para su hijo de dos años, él contrato a un payaso, el cual nunca llegó y tuvimos que ser los payasos de la fiesta. El niño cumplía dos años y ahora ya tienen 25, exactamente fue un 2 de abril”, recordó Jaime.
Los hermanos Maya Díaz decidieron montar un número artístico disfrazados de payasos, a pesar de no tener en ese momento el vestuario o una rutina cómica, improvisaron su maquillaje con cosméticos y pelucas de peluche.
“En ese momento hicimos algo bien improvisado con cosméticos de dama, lápiz labial y todo eso que las mujeres utilizan para maquillarse; nos pintamos el rostro y usamos pelucas de peluche, nos pasaron algunos tips e improvisamos un show de dos horas”, recordó Carlos, quien desde entonces se hace llamar Mame cuando porta el disfraz.
El show improvisado —relataron— gustó a los asistentes, de tal manera que ese día lograron concretar un contrato con uno de los espectadores.
Jaime y Carlos no sólo se dedican a amenizar fiestas de niños y adultos, sino que su trabajo de pila lo realizan en la Secretaría de Salud estatal; el primero como verificador sanitario y el segundo como enfermero.
Pero ser payasos y desempeñarse en la dependencia de salud, no es la jornada completa de los parientes, ya que los hermanos también practican la lucha libre en la Arena Querétaro.
“Vimos una oportunidad de un trabajo extra para complementar nuestros ingresos; al principio no sabíamos cuánto cobrar, pero poco a poco fuimos adquiriendo material para hacer un show más completo; por ejemplo hay representaciones que van desde mil 800 pesos hasta 3 mil 500, lo cual depende de lo elaborado del espectáculo y del tiempo que nos piden realizar el trabajo”, detalló Jaime.
En su oportunidad, su hermano y compañero de trabajo, Carlos conocido desde hace 23 años como Lukín, comentó que lo más difícil de su trabajo no corresponde a la labor que desempeña como payaso, sino a los obstáculos y los problemas que tienen que sortear en la vida diaria.
Respecto del show, el payaso Lukín dijo que cada uno es diferente pues depende de lo que el cliente requiera para su fiesta; nosotros metemos lo que nos pidan, como la lucha libre o chistes para niños o para adultos un poquito más subidos de tono; también nos disfrazamos de Paquita la del Barrio o de Alejandro Fernández, explicaron.
“Somos luchadores profesionales, entonces por eso metemos un poco de lucha libre, es algo que ya traemos hecho, de hecho, no hay algún ensayo, nada más nos ponemos de acuerdo en lo que vamos a presentar, sólo para que no haya un contratiempo en el show y no nos lastimemos”, dijo Carlos.
Los hermanos Maya Díaz se dedican a la lucha libre profesional desde hace 22 años, tiempo en el que se han presentado en la Arena Querétaro.
“En el show de imitación, pues lo hacemos juntos, y en la lucha libre somos pareja; lo que no hacíamos de niños —que no nos juntábamos—, lo hacemos de grandes, somos payasos para todos lados, somos luchadores para todos lados y trabajamos en la misma dependencia”, celebró Jaime.
