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Los tiernos muñecos de trapo hechos por la señora Esperanza Buenrostro Arvizu se han convertido en una forma de ayudar a los residentes del Asilo San Sebastián, pues con la compra de éstos se apoya a la manutención del lugar.
Los muñecos son los abuelitos Tiana y Sebastián; cada pieza está hecha a mano y con mucho amor; así Esperanza ayuda a otros adultos mayores.
Recientemente, la dirección del asilo San Sebastián, ubicado en Otoño 17, Barrio de San Sebastián, Querétaro, inició la campaña “Muévete por los abuelos”, con la que buscan concientizar a la población sobre las distintas necesidades de los adultos mayores, y las acciones que podemos hacer para mejorar su calidad de vida.
La elaboración de estos simpáticos abuelitos, es parte de dicho movimiento.
Fue idea de Elizabeth Ugalde, directora del asilo, que los muñecos se diseñaran con dos objetivos; el primero, emplear a mujeres costureras; y el segundo, incrementar la solvencia del lugar, que funciona a través de donaciones.
“Buscamos a alguien cercano como doña Esperanza para que nos ayudara y así comenzó a generarse una fuente de trabajo y terapia ocupacional para ella y otras abuelitas que están en casa, pudiendo ocupar su tiempo en una actividad productiva, y se convierten en abuelos ayudando a otros abuelos”, dice.
Una de las figuras se llama Sebastián, en honor al nombre del asilo. Cada muñeco tiene un costo de 350 pesos, pueden comprarse en las instalaciones del lugar o hacer un pedido a través de la página de Facebook con el mismo nombre. Cada pieza se entrega acompañada de una pequeña postal con una leyenda escrita a mano, que dice “100% hecho a mano por la abuelita Tita”.
Elizabeth confiesa que el proyecto ha funcionado mejor de lo esperado, pues en pocos días ya se han vendido varios de estos muñecos, sobre todo, recientemente por las celebraciones por el Día del Abuelo, varias familias compraron alguno de estos muñecos para regalarlos a sus adultos mayores.
También Esperanza o Tita como la llama su familia, se ha sorprendido con la buena respuesta que tienen sus creaciones, pues asegura que nunca había realizado actividades de costura o bordado de muñecos.
Tita cuenta que al recibir la invitación del asilo, ella y su hija Miriam pusieron manos a la obra. Primero diseñaron los moldes y después confeccionaron la ropita y cada uno de los accesorios de los muñecos. Las abuelitas, vestido a flores y collar de perlas; los abuelos, bigotes blancos, bastón y morral.
Inicialmente, ellas dos hacían todo el trabajo a mano, pero al ver la respuesta de la gente y la demanda de muñecos se ayudan de una tercera persona para coser algunas cosas a máquina.
“Nunca habíamos hecho algo así, pero parece que a la gente le ha gustado mucho. Mi hija hace los moldes de los cuerpecitos y los vestidos, yo me dedico a coserlos y a poner los accesorios, todas tenemos un trabajo. Antes lo hacíamos todo a mano pero eso nos llevaba mucho tiempo, ahora ya hay una persona que cose los moldes en su máquina y eso nos ayuda bastante.
“Es una terapia muy buena, trabajo en esto en mis tiempos libres y la verdad es hasta relajante trabajar en lo de los muñecos, también es un dinerito extra que me ayuda mucho, a quién no le sirven unos pesitos extras”, comenta Esperanza, quien ya tiene una relación cercana con el asilo desde hace varios años, pues preparaba comida para los residentes.
Aunque Esperanza y su hija Miriam Gutiérrez Buenrostro han encontrado una forma de eficientar su trabajo, la elaboración de un muñeco aún le lleva varias horas al día, pues algunas cosas deben pegarse y esperar a que seque, mientras otras aún se deben coser y cortar a mano.
Aun así, Tita pide a las familias queretanas que apoyen este proyecto, con múltiples beneficios, pues ayuda a las personas que lo realizan y también a los abuelitos del asilo.
“A la gente yo le pido que apoyen este proyecto, porque el asilo nos compra estos muñecos y ellos también los venden, pero lo importante es que con eso también se apoya a los señores del asilo. Yo antes los apoyaba con comidas, me gustaba ir y cocinar para los residentes, ahora los apoyo de esta otra forma”, comenta Esperanza.
Debido a que el asilo San Sebastián es una asociación que depende de las donaciones y aportaciones voluntarias, los interesados en apoyar el trabajo realizado en esta casa hogar pueden hacer donaciones en especie o en efectivo.
Las aportaciones pueden realizarse a través de depósitos en farmacias y algunas tiendas de conveniencia a la cuenta Banorte 4915663035007989. Para Asilo S Sebastian. O transferencias en Banorte con los siguientes datos: A Asilo San Sebastián IAP. Código banco 0236. Cuenta 0536700885. Clabe Interbancaria 072680005367008855
