“Súbale, pasamos por Avenida Peñaflor y el servicio es gratuito”, explica Rosa Alejandra a un grupo pequeño de personas que piden información sobre el recorrido que hace la unidad y también sobre las otras rutas que operan en esta línea de camiones amarillos.

“Este es un servicio gratuito que da el municipio y no se cobra”, insiste Rosa Alejandra quien, con un uniforme en amarillo y azul marino y su obligado cubrebocas, organiza a los pasajeros que suben al camión que los llevará desde Avenida de la Luz hasta las colonias más alejadas de la capital.

Sin cubrebocas no se permite el acceso a la unidad, comenta Rosa Alejandra a EL UNIVERSAL Querétaro, quien se encarga de dar gel y tomar la temperatura a los pasajeros, pero también recaba sus datos, ya sea vía electrónica por medio del celular con un código QR o a través de formatos donde se utiliza el papel y la tinta.

Rosa Alejandra es empleada de la Secretaría de Movilidad del gobierno municipal de Querétaro, instancia que opera el programa que se denomina Acercándote, que utiliza las unidades pintadas en color amarillo que se empleaban anteriormente para llevar a niños a las escuelas a través del “transporte escolar gratuito”.

Este programa implementado en diciembre pasado tiene como objetivo facilitar la movilidad en la nueva normalidad que se tiene en el Escenario C de la pandemia por el Covid-19, donde se busca evitar aglomeraciones en la calle y en el transporte público.

Este esquema, implementado desde mediados del mes pasado a través de seis diferentes rutas, ofrece transporte público gratuito para acercar a los habitantes de 50 colonias de la zona norponiente y centro de la ciudad a los ejes estructurales del sistema Qrobús.

Rosa Alejandra Hernández González es asistente en la unidad 1736, “y lo que hago es realizar tarea de sanitización con los pasajeros; les doy gel antibacterial, hago los registros de las personas que se suben, escaneo los códigos QR y verificar que el usuario estén registrado en el programa”, platica.

Esta labor de asistir el abordaje de la unidad no es nuevo para ella, pues ya lo hacía anteriormente con niños a los cuales se transportaba para llevarlos de sus casas a las escuelas. “Mi jornada laboral inicia actualmente a las 5 de la mañana, a esa hora llego al patio en donde se guardan las unidades”.

“Yo me encargo de ver desde muy temprano que la unidad esté limpia y en buenas condiciones para salir a nuestros recorridos que empiezan a las 6:00 horas. Este programa trae muchos beneficios para los usuarios, pues hace unos días una señora me comentaba que pagaba hasta ocho camiones diarios por los diferentes transbordos que hace y con el servicio que le damos ya se está ahorrando la mitad de lo que venía gastando”.

La función de esta mujer es preguntar a los pasajeros su destino y cuando están cerca del lugar se anticipa y le avisa al operador que deberá parar para dejar al usuario en determinado sitio, “pero también estoy atenta de que no se levanten de la unidad cuando va en marcha, esto con el fin de evitar algún percance o accidente al interior”.

Por la pandemia que se vive, Rosa Alejandra les avisa a los pasajeros que es obligatorio que usen el cubrebocas para que se les preste el servicio, “y también yo les asignó los lugares, pues lo que busca que es se mantenga la sana distancia al interior. Máximo podemos llevar 20 pasajeros en la unidad la cual tiene capacidad para 45 personas sentadas”, detalla.

“Cuando el pasajero sube, me tiene que entregar un código QR por medio del celular o un folio de su registro como beneficiario del programa que se da en la página del gobierno municipal. No se le niega el servicio a las personas que todavía no se inscriben, sin embargo, les pedimos que se registren”.

Seis rutas alimentadoras

Son 20 camiones y dos camionetas urvans –todas pintadas en color amarillo-, propiedad del gobierno municipal de Querétaro, que forman parte del programa de transporte escolar, que en este momento no se utilizan para tal fin debido a que desde marzo se dejó de transportar de manera gratuita a los niños debido a que no se tienen clases presenciales en las escuelas de la entidad.

Para la prestación del servicio se dispone de 45 operadores y 40 asistentes para lograr una frecuencia de paso de 15 minutos y hacer más fluidos los traslados.

Las seis rutas son: Juncos-Avenida de la Luz; Monte Atlas-Avenida de la Luz; La Loma-Avenida de la Luz; Rancho San Pedro-Avenida de la Luz; Peña Flor-Avenida de la Luz; y de la colonia Casa Blanca-Constituyentes.

Jehovanny Pérez Canul, jefe de Planificación del Sistema de Transporte Sostenible del gobierno capitalino, explica que este esquema se diseñó para tener circuitos, en su mayoría que están alrededor de Avenida de la Luz, por donde pasa uno de los ejes estructurales del sistema Qrobús, que más se usan en la ciudad.

El servicio, explica, se ofrece de lunes a domingo, no se cobra, opera con un horario de 6:00 de la mañana a las 10:00 de la noche “y el usuario puede subirse a las unidades las veces que lo requiera, sin ningún costo adicional”.

Para ser beneficiario de este servicio sólo deben registrarse a través de la liga http://107.21.35.55/acercandote/ y generar un código QR, mismo que fungirá como boleto para acceder al transporte.

Para seguridad de los pasajeros, las unidades cuentan con seis cámaras que permanentemente monitorean lo que sucede al interior, pero, además, existe un sistema de monitoreo satelital que se opera desde la base de la Secretaría de Movilidad que permite rastrear en tiempo real la ubicación de las unidades de este servicio.

Rutas médicas

Además de este programa, dijo que también hay otras unidades que forman parte de la flota del transporte escolar con las cuales se da servicio de manera gratuita al personal médico de Querétaro que atiende la pandemia en los Hospitales General y de Especialidades del Niño y la Mujer. y a los hospitales regionales 1 y 2 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

El director del Instituto Queretano del Transporte (IQT), Alejandro López Franco, dijo que con las rutas médicas se permite al personal de salud llegar diariamente a los nosocomios para integrarse al primer frente de batalla contra el Covid-19 y garantizar la atención en los centros hospitalarios, así como regresar a sus hogares al final de sus jornadas laborales.

“No hay otra ciudad con 16 rutas como las que tenemos. Desde que inició el programa ustedes han permitido realizar más de 87 mil viajes de manera segura y tranquila al personal médico: desde camilleros, personal de aseo, pero también médicos y enfermeras que están cuidándonos y a todos les damos el mismo valor y la misma importancia”, expuso.

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