La Arquidiócesis Primada de México informó que el 26 de julio comenzará el regreso gradual al culto público en los templos de la capital.

Señaló que en la reapertura de los centros religiosos no se podrá superar 20% de la capacidad y se observarán las medidas higiénicas.

“Cada comunidad parroquial tiene un contexto social distinto; por ello, según lo indiquen las condiciones en su entorno, serán diferentes los tiempos para la reapertura”, afirmó el arzobispo primado Carlos Aguiar Retes.

A través de un comunicado, señaló que los templos que se encuentren en las colonias con alto nivel de contagio tendrán que esperar un poco más para la reapertura.

“Sigue vigente la dispensa del precepto de asistencia a la misa dominical y fiestas de precepto para todas aquellas personas que deben permanecer en alerta y precaución, particularmente ancianos, enfermos y mujeres embarazadas”, dijo.

Aguiar Retes agradeció a presbíteros, consagrados, diáconos, permanentes y fieles por su colaboración “ante tan desafiantes y varias circunstancias planteadas por la actual pandemia”.

Agregó que bajo esta indicación, de manera gradual y opcional, cada responsable de parroquia, en diálogo con el respectivo Vicario Episcopal Territorial, decidirá la fecha y modos precisos para retomar las actividades, de manera que los feligreses analicen y decidan cuándo y en qué forma se reincorporarán.

“He considerado muy loable y consolador que cada párroco y los presbíteros en general ofrezcan la primera santa misa con presencia de fieles a todas las personas que han fallecido a causa de la pandemia, las familias en duelo y al personal de la salud”, agregó.

De manera previa, la Arquidiócesis informó que un requisito para reabrir los centros de culto fue que los párrocos, rectores y capellanes mostraran los resultados negativos de las pruebas Covid-19 a las que por seguridad se sometieron.

“En caso de que alguien dé positivo, deberá seguir los protocolos sanitarios necesarios: aislamiento, seguimiento médico y mantener cerrado el templo que atiende hasta que cumpla con el tiempo recomendado por el personal médico.

“Hemos de ser muy responsables y precisos, de manera que ningún presbítero está autorizado a abrir el templo que atiende sin antes haberse realizado la prueba”.

En el documento Orientaciones y criterios para el retorno gradual a las celebraciones litúrgicas con asistencia de fieles, que incluye los pasos a seguir para el retorno, se invitó a los fieles a ser responsables con su salud y la de los demás, por lo que deben asistir a las celebraciones litúrgicas con cubrebocas y se pide que aquellos que tengan síntomas de Covid-19 permanezcan en casa.

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