Hace cuatro años Lety Ortiz tomó la decisión de pertenecer al cuerpo de seguridad pública del estado. Es una de las cuatro mujeres que forma parte del Grupo de Rescate y Operaciones Especiales (GROE) de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).

Esposa de un policía y madre de una niña de un año, Leticia reconoce que ya no existen diferencias entre hombres y mujeres dentro de la labor de seguridad: las responsabilidades y riesgos son los mismos.

“No hay diferencias. Dentro del grupo tengo mucho el apoyo de mis compañeros, cualquier cosa que se nos dificulta, pedimos apoyo y se recibe la ayuda; somos cuatro mujeres en el grupo y se nos trata por igual, es el mismo trabajo y el mismo riesgo para todos”.

Pero Leticia Ortiz Espino tiene otra cualidad: es reconocida a nivel nacional como la mejor en el manejo de arma de fuego; este 2014 ganó el campeonato de tiro.

“Gracias a todo el apoyo que me han brindado mis superiores. Se práctica hasta tres veces a la semana, es difícil también porque soy madre de familia, porque son muchos los sacrificios que hay que hacer para llegar a estos logros; ya son varios campeonatos en los que participo y esta vez gané a nivel nacional”.

La labor, asegura, es complicada, hay hora de entrada, pero nunca de salida, tampoco se sabe si al salir de casa se llegará con bien al final de la jornada; los riesgos son todos los días, pues de entrada el GROE es quien enfrenta primeramente todas las situaciones de crisis.

“Es difícil, también mi esposo es policía y por eso le echamos ganas, porque sabe lo que es portar el uniforme, tenemos mucha comunicación y son grandes sacrificios los que hacemos, pues tenemos a una pequeña de un año”.

“El grupo en donde estamos, que es el de rescate, se trabaja las 24 horas y hay que estar disponibles al momento en que te hablen. Entramos en intervenciones, en donde no sabes cómo te van a recibir y desde ahí es un gran temor, un gran miedo, pero estamos preparados para enfrentar las situaciones”.

Leticia se despierta a las 06:00 horas todos los días. La hora de llegada no se conoce. Arregla a su hija, sus cosas y las lleva a casa de sus abuelas, “a veces creo que ya ni me conoce de tan poco que me ve”.

“Desde las seis de la mañana, preparar a la niña, uniformes, llevar a la niña con mi mamá o mi suegra, tenemos el apoyo por parte de ellos; tenemos hora de entrada, pero no de salida. Es bonito el trabajo, te llevas muchas experiencias y satisfacciones”, explica.

RÉCORD DE AUTOS RECUPERADOS

Otro caso de policías ejemplares es el de Iván López González, agente estatal desde hace más de 16 años, mismo tiempo que lleva de casado, el mismo periodo en que ha tenido y visto crecer a tres hijos.

La cualidad de Iván, y que todos resaltan, es su especialidad para detectar y recuperar automóviles con reporte de robo; en sus años de servicio, ha logrado la recuperación de 102 vehículos, desde transporte de carga y todo tipo de unidad automotora.

Esta labor se ha logrado con el apoyo de todo el equipo de trabajo, afirma, siendo un reconocimiento que no sólo le corresponde a él, sino a toda la corporación.

“Ha sido una labor muy ardua, pero gracias al trabajo de equipo, con el grupo de investigación y el secretario, Adolfo Vega, se ha podido establecer este récord”.

“Nosotros trabajamos en prevención del delito y la investigación, y se han combinado los dos para detener a personas por tentativas de robo, robo de vehículo, incluso, se ha hecho recuperación de transporte de carga federal de otros estados”, detalla.

Iván es reconocido todos los años en el marco del Día del Policía, y es que se sabe de la capacidad de reacción para detectar, recuperar y, en su caso, someter a quienes delinquen.

Este año no fue la excepción y en el marco de los festejos del Día del Policía, recibió uno de los 120 reconocimientos que entregaron autoridades del estado.

—¿Qué significa haber tenido este reconocimiento por tu labor?

—Significa mucho, al darme este reconocimiento se le premia a la Policía Estatal y a elementos del trabajo.

“Estoy casado desde hace 16 años; tengo tres hijos que estudian la primaria, bachillerato; mi esposa es promotora; ellos están orgullosos de mi labor, únicamente dicen que es muy difícil, porque me quita mucho tiempo y les dedico menos a ellos”, expone.

Explica que los riesgos son siempre, especialmente cuando se dan persecuciones y resistencia para la entrega de los coches.

“Han sido varias situaciones de riesgos, de personas armadas, robos en proceso de vehículos; hubo un caso en que se detectó el auto, lo detuvo un elemento de mi grupo y en ese coche se transportaba droga”.

“Unas personas iban drogándose, se detecta el vehículo y ‘bota’ con reporte de robo, al hacer la inspección vemos como 8 kilos de mariguana, por lo que se detuvo a las personas”.

Ser policía te marca de por vida; el trabajo de todos los días, la convivencia con los compañeros: “ellos arriesgan la vida contigo”.

Afirma que todo sacrificio vale la pena, pues todo es para que prevalezca una sociedad de paz y tranquilidad. “Es un sacrificio, pero vale la pena por la sociedad; me levanto a las seis de la mañana y término a las tres de la mañana”.

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