En San Juan del Río operan más de 300 lugares con venta clandestina de alcohol y que no se han podido regular, de acuerdo con el regidor José Salum Cervantes, quien no descartó que la venta de alcohol en el municipio pueda salirse de control, si no hay una intervención de las autoridades para detener el clandestinaje que se registra en domicilios particulares y la regulación de los comercios dedicados a vender cerveza.

“Hay que ser realistas, sí hay muchos lugares que no son tan clandestinos donde se venden bebidas alcohólicas, pero ya no es función de los regidores del ayuntamiento verificar esa situación”, dijo.

El presidente de la Comisión de Comercio consideró necesario fomentar la regulación de estos lugares para garantizar que operen correctamente y en los horarios permitidos, descartando que la negativa en el otorgamiento de los permisos signifique una estrategia adecuada para disuadir la venta ilegal de bebidas en San Juan del Río.

Ayer en sesión de cabildo se aprobaron cinco permisos para la venta de alcohol, uno de estos para consumo en el establecimiento. Las autorizaciones corresponden a negocios ubicados en comunidades donde las quejas son recurrentes respecto al excesivo consumo de cerveza y las riñas generadas por jóvenes ebrios.

El regidor, Servando Miranda, consideró necesario frenar el otorgamiento de licencias de alcohol para evitar un mayor consumo en comunidades, no obstante, Salum Cervantes consideró factible que estos negocios cuenten con los permisos.

“No cuestiono el trabajo de finanzas pero se debe considerar el hecho de que se emitan licencias para la venta de cerveza sobre todo en las comunidades donde se han registrado riñas por el consumo de alcohol”, dijo Servando Miranda en sesión de cabildo.

Pero para el regidor de comercio es mejor que los establecimientos que ya se dedican a la venta de alcohol cuenten con permisos que permitan a las autoridades ubicarlos y con ello dar seguimiento a su actividad, de esta manera, dijo, se puede disuadir la venta a menores y en horarios no permitidos.

Salum Cervantes aclaró que en el caso de los domicilios particulares dedicados únicamente a vender cerveza por la noche y madrugada, deben ser detectados y clausurados por la dirección de Protección Civil.

“Tenemos un reporte sobre la existencia de más de 300 puntos de venta clandestina de alcohol en todo el municipio y corresponde a la dirección de Inspectores llevar a cabo los trabajos de clausura de estos lugares”, dijo el regidor y aclaró que aunque las autoridades municipales dan permisos para vender alcohol, éstos deben tramitar la licencia estatal o en caso contrario los permisos municipales tienen vigencia de tres meses y se procede a clausurar la venta de bebidas en esos lugares.

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