El pueblo mágico de Bernal recibirá el próximo sábado a corredores queretanos en la primera edición de la Carrera Nocturna de la localidad del municipio de Ezequiel Montes, donde se espera una participación cercana a los 300 competidores y con la que se busca continuar promoviendo el destino turístico.
Son dos distancias contempladas: 12 y 7 kilómetros, en un circuito trazado en las inmediaciones del centro del lugar, tendiendo como salida y meta el Jardín San Sebastián, y de fondo la Peña de Bernal, totalmente iluminada.
“En realidad este es un evento que se hace en conjunto con un evento que nosotros denominamos Carnes, Quesos y Vinos de Ezequiel Montes, se va llevar a cabo del 16 al 18 de agosto”, reveló la directora de turismo del municipio de Ezequiel Montes, Verónica Huerta.
“Nosotros tenemos contemplados entre cinco y seis mil personas que nos acompañen, porqué van estar presentes las principales vinícolas del centro país y nos acompañan los principales quesos de la región, este es un evento que también va acompañado de un rico programa artístico y catas, garantizando un lleno total en todos los hoteles de Bernal”, agregó.
El costo de inscripción para el evento es de 250 pesos, el cual incluye playera, numero de competidor, medalla y abastecimiento durante toda la carrera, en los puntos colocados cada 2.5 kilómetros.
Marco Tamayo, organizador de la carrera, explicó que podrán participar personas de todas las edades, al ser un evento enfocado a la convivencia familiar, y tomando en cuenta que la categoría es única para todos los corredores. Al finalizar se premiará a los primeros tres lugares de cada rama.
Calles de adoquín, empedradas, subidas, bajadas, son algunos de los elementos que conforman la primera Carrera Nocturna Bernal 2013, recorrido que iniciará a las 20:30 horas y para el que se hace la invitación de llevar algo con qué iluminar el camino, una linterna de mano o luces de minero, con el propósito de correr por el pueblo admirando el paisaje nocturno, enmarcando una imagen de postal con la Peña de Bernal iluminada al fondo, para el deleite de los asistentes.
