Según el Informe Estatal del Ejercicio del Gasto de 2024, del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), en 2023 se recaudaron aproximadamente 56 mil 490 millones de pesos a nivel estatal, fue 17.4% más que los 48 mil 110 millones de pesos que se estimaba recibir (sin sumar ingresos por financiamiento), destaca el documento.

El reporte señala que los ingresos propios aumentaron 25.65% y los federales 11.73%, entre lo estimado y lo recaudado, mientras que por ingresos derivados de financiamiento se recibieron cerca de mil 600 millones de pesos en 2023.

Los ingresos federales equivalieron a 79%; los propios representaron 18.2%, y por financiamiento fueron 2.8%.

Entre todos los ingresos, la mayoría fueron por participaciones y aportaciones federales, luego por impuestos, derechos, ingreso de financiamientos y otros.

El año anterior, el gasto público ejercido en el estado fue 8.25% mayor al recurso aprobado, y en los ingresos la diferencia fue de 17.4%, señaló el Imco.

Además, dijo que Querétaro fue uno de los siete estados cuyo gobierno presentó inconsistencias entre los montos reportados como estimados o aprobados en sus informes trimestrales y los establecidos en las leyes de ingresos o presupuestos.

Mientras se aprobó un gasto por casi de 51 mil 640 millones de pesos, se ejercieron aproximadamente 55 mil 900 millones de pesos, indicó el Imco.

El gasto en gobierno, en desarrollo económico y en otras funciones tuvieron aumentos entre lo aprobado y lo ejercido, con alzas de 29.57%, 507.33% y 16.67%, respectivamente. Mientras que en desarrollo social hubo una caída de -11.57%.

Del gasto ejercido, por la función en la que se erogó, 54.1% fue recurso para desarrollo social, 19.1% en gobierno, 9.4% en desarrollo económico y 17.5% en otras funciones.

El gasto en desarrollo social abarcó los rubros de educación, salud, vivienda y servicios a la comunidad, protección social, entre otros. Mientras que el gasto en gobierno fue destinado para asuntos de orden público y de seguridad interior, así como para justicia, otros servicios generales, asuntos financieros y hacendarios, legislación y coordinación de la política de gobierno.

En desarrollo económico, el gasto se calificó como “otras industrias”, transporte, turismo, asuntos económicos, comerciales y laborales, así como protección ambiental.

Y en otras categorías no clasificadas en las funciones anteriores, se gastó en transferencias a municipios y en transacciones de la deuda pública.

El Imco realizó este informe con el objetivo de fomentar una mejor planeación de los ingresos y del gasto público, así como promover una mayor rendición de cuentas en los estados.

“El tipo de adecuaciones presupuestales (tanto recortes como aumentos) que se documentan revelan áreas de oportunidad en la planeación, ejecución y seguimiento de los recursos públicos, y subrayan la importancia de limitar la discrecionalidad que las secretarías de finanzas estatales tienen en la gestión de los recursos locales”, advierte el informe que elabora el Imco.

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