El holandés Hardwell fue recibido, la noche del jueves, en Querétaro como lo que es: el mejor DJ del mundo.

Acostumbrado a reunir multitudes, para el mezclador, con las cinco mil almas que lo esperaban en la Plaza de Toros Santa María, habrá sido como estar en un salón de fiestas infantiles en su barrio de Holanda, su tierra.

Pero la devoción que le tienen los jóvenes queretanos a este hombre, maestro del electro house, progressive house, tech house y todo lo que se asocie con house, no tiene límites. Fue como si la gente hubiera visto a un dios del punchis, punchis.

Los fans del holandés se dieron cita desde las siete de la noche y esperaron seis horas para ver a su ídolo. La salida del músico estaba programada para la media noche, pero Robbert van de Corput, mejor conocido como Hardwell, apareció en el escenario en los primeros minutos de la madrugada.

Cecilia y Laura son dos garotas que viajaron desde Brasil sólo para estar frente al holandés. Ale y Damaris se dieron una escapada desde Aguascalientes y no daban crédito cuando fueron seleccionadas por un guarura horrible para ingresar a la zona VIP del reven. Habrán pensado que iban a encontrar a su ídolo y sólo se toparon con “mirreyes” queretanos.

Muchos aprovecharon para festejar el Halloween y se disfrazaron. Algunas diablitas de veintitantos paseaban tentando las debilidades de los pecadores. A un Linterna Mágica ya se le habían pasado las copas y se puso necio. Un zombie y su novia Mujer Maravilla llegaron tarde y corrían para no perderse el reventón.

El asistente más joven de la fiesta fue Mateo, un bebecito de apenas menos de un año, que miraba con asombro la locura electrónica asombrado, con chupón en boca y desde los brazos de su mamá, Sheila, una niña también.

Algunos chicos pagaron hasta mil 500 pesos por un boleto de 800 en el floor dance, y el vendedor ilegal negociaba las entradas piratas directamente con los organizadores. Mientras que el equipo de seguridad estaba más atento en seleccionar chicas para las zonas VIP y no en cuidar. Fuera de eso, la fiesta de Hardwell en Querétaro fue perfecta.

Los chamacos queretanos dejaron tirada tanta energía en ese pequeño ruedo de la Plaza de Toros Santa María, que si se pudiera reunir y meter en un generador, se podría alumbrar toda la ciudad por varios días.

Hardwell fue recientemente elegido como el mejor DJ de mundo en el 2013 por la revista DJ MAG’S, y actualmente recorre el mundo disfrutando de su reinado.

Luego de su paso por Querétaro, Hardwell se presentará el sábado 2 de octubre en el Pepsi Center de la Ciudad de México. La gira I am Hardwell World Tour pasará por Estados Unidos, Sudáfrica, Portugal, Israel. En el 2014, ira a Guatemala, Inglaterra. Brasil, Australia, entre otros.

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