Más Información
Durante junio y julio los casos de enfermedades diarreicas pueden incrementarse hasta 60% en comparación con las que se presentan el resto del año, señaló la secretaria de Salud, Martina Pérez Rendón.
Explicó que de enero a marzo hay un comportamiento estable, es decir, que son pocos los casos que se presentan.
“Las enfermedades diarreicas y respiratorias son dos padecimientos que están presentes todo el año a menor magnitud, en el caso específico de las diarreas, tenemos un comportamiento de enero a marzo estable y los meses de abril, mayo y junio va subiendo de forma gradual, el pico más alto generalmente son junio, julio”. Todavía en agosto, añadió, se presenta cierto incremento, pero comienza a descender y llegan a una meseta.
Pérez Rendón refirió que los grupos más vulnerables son los extremos de la vida, los menores de cinco años y los mayores de 60. “Son los que son más propensos a la deshidratación, en la diarrea ese es el problema, si no se repone rápido el líquido que se pierde se produce deshidratación e incluso pudiera llegar a la muerte”, aseveró.
Las enfermedades diarreicas, dijo, se agudizan con la temporada de calor, pero ahora también debido a incremento en la movilidad después de dos años de contingencia sanitaria y que las personas vuelven a consumir alimentos en calle.
Recalcó que trabajan en la prevención de este tipo de enfermedades, que aseguró se puede lograr con el lavado de manos antes de comer, después de ir al baño, después de cambiar pañales y antes de preparar alimentos.
“En el caso de tomar agua debe ser hervida, clorada o purificada y los alimentos bien cocidos o fritos y los que se consuman sin cocción debemos tenerlos en refrigeración, previo a su consumo”, especificó.
Además, también se pueden presentar los golpes de calor, de los cuales aseguró no tiene el registro de ninguno; pero siguen trabajando en los centros de salud para que el personal sepa identificarlos para poder canalizar al paciente al hospital.
“Los golpes de calor e insolaciones que ciertamente es un fenómeno de salud que vigilamos en esta temporada, hacemos promoción para prevenirla al momento no tenemos registro de ello, a veces llegaban a suceder en Semana Santa, afortunadamente no se presentó”.
Para prevenir los golpes de calor se sugiere evitar realizar actividades físicas y exponerse al sol entre las 12:00 y 16:00 horas, utilizar ropa clara y holgada, así como sombreros o gorras, gafas de sol, usar bloqueador y beber abundante agua. Algunos de los síntomas son: piel roja y sudoración excesiva.
