La mujer que fue golpeada por un mesero de la taquería La Guelaguetza, en la ciudad de Querétaro, ya se presentó a denunciar penalmente a su agresor, quien todavía no ha sido detenido.

Además de que por el momento la autoridad no sabe qué tipo de sanción podría imponerle debido a que todavía no se conoce la gravedad de las lesiones de la víctima, pues la fiscalía se encuentra en espera del reporte del médico legista.

Así lo dio a conocer el fiscal general del estado, Alejandro Echeverría Cornejo, quien por cuestiones legales precisó que no se puede revelar la identidad de la mujer que fue golpeada en dicha taquería y cuyo hecho se conoció por un vídeo que circula por redes sociales.

“Ya se presentó (la mujer golpeada), ya declaró y confirmó como se dieron los hechos que ya son del conocimiento público a través de las redes sociales; a partir de esto nos vamos a poner a trabajar”, detalló Echeverría Cornejo.

Dio a conocer que hasta ayer habían declarado 15 personas como testigos de los hechos. “En este caso ya se tiene identificado al imputado”, aseguró el funcionario quien reiteró que el presunto agresor todavía no es detenido y a decir del establecimiento fue despedido tras presentarse este incidente.

Al momento de presentarse a denunciar los hechos, dijo que la víctima relató “la forma en que fue violentada y también explicó la forma en cómo sucedieron las cosas, como llegó, con quien llegó y como se dieron las cosas”.

Por cuestiones de la integración del proceso y la realización de la investigación, el fiscal queretano subrayó que no se puede dar más detalles de este caso, que se encuentra en la integración del expediente.

Echeverría Cornejo no precisó qué tipo de sanción podría alcanzar el agresor, pues subrayó que depende del tipo de lesión que tenga la víctima, “el médico tendrá que valorar el tipo de lesiones que presenta y en razón de ello se podrá determinar la penalidad”.

“Ella al momento que se presenta fue certificada por el médico legista, que forma parte de la Fiscalía General del estado y a partir de ahí se tendrá que continuar con la investigación y posteriormente judicializar el expediente”.

Video presenta la mitad de los hechos, dicen. Dos de los testigos que presenciaron el incidente, y quienes declinaron revelar su identidad, aseguraron que antes de presentarse la agresión física, la mujer estaba en estado de ebriedad y también incurrió en ataques a clientes y personal, los cuales no fueron grabados.

Ante los cuestionamientos del porqué nadie trató de defender a la mujer, uno de los testigos explicó que intentó, junto con otros clientes, enfrentar al taquero que propinó los golpes, sin embargo, los meseros lo impidieron e incluso “un taquero traía hasta un machete, por eso ya nadie se metió, todos nos salimos, pero la ‘morra’ andaba bien ‘peda’, para que esto pasara ella se madreó a una chava antes, aventó platos y andaba empujando a todos lo que trataban de calmarla y por eso los meseros la detuvieron”, detalló.

Una mujer que estuvo presente en la taquería aquella madrugada coincidió con la versión del primer testigo, y aunque reconoció que en ningún momento se debió agredir de ningún modo a la mujer, ésta tampoco tuvo que actuar como lo hizo.

“No es correcto, bajo ningún concepto, que este muchacho haya golpeado a esa chica, pero es mucho menos correcto que ella ande agrediendo a hombres y mujeres en la taquería, respaldada en su excesivo nivel de alcohol.

“Se suben imágenes incompletas a la red y la gente populariza la noticia sensacionalista. Ella no sólo gritaba, ella golpeó antes a otra muchacha dentro de la taquería, tiró platos y cucharas, por eso la acorralaron y al final terminó pasando el desafortunado episodio del que hablamos. Las acciones del muchacho son totalmente reprobables pero también lo son las acciones de la muchacha y ambos merecen castigo. Los asistentes no se metieron a ayudarla porque el asunto se puso tan rudo que el personal de la taquería sacó cuchillos y todo para defenderse de la incontrolable mujer”, contó la testigo.

El abogado Héctor Parra Rodríguez estimó que la sanción más alta que podría alcanzar el agresor es de seis meses de prisión conmutable con una fianza no mayor a los 3 mil pesos.

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