Miami .— En el regreso a lo que un día fue su reino, LeBron James tuvo un buen accionar, pero el resto de sus compañeros no estuvo a la altura de la exigencia del compromiso y los Cavaliers de Cleveland cayeron 91-101 ante el Heat de Miami en el encuentro más destacado de la jornada de Navidad.
James, quien jugó con el Heat cuatro temporadas y contribuyó a dos campeonatos de la franquicia, fue recibido con aplausos por el público que un día vitoreó. ‘The King’ terminó el partido con 30 puntos, ocho asistencias y cuatro rebotes, que resultaron insuficientes ante la actuación que tuvo el guardia de Miami, Dwyane Wade.
Fue el primer partido que LeBron enfrentó a su ex equipo y en el cual antes del inicio y después de la conclusión, se dio el tiempo para abrazar a varios de sus ex compañeros.
Uno de ellos fue Wade, fiel amigo de LeBron, que contribuyó para Miami con 31 unidades, cinco tablas, cinco asistencias y dos robos.
Chris Andersen anotó otros 12 para el Heat, que durante el tercer cuarto del partido llegó a tener una ventaja de 17 puntos, en lo que fue otro cotejo en el cual no estuvo Chris Bosh, quien sufre una lesión en la pantorrilla.
James y Wade compartieron un largo abrazo antes del partido, fueron charlando y riendo mientras esperaban para que arrancara la segunda mitad. Incluso tenían otra conversación antes de abandonar la duela, cuando el reloj de juego aún no expiraba.
Después de una estadía en casa 4-1, los Cavaliers fueron a pasar Navidad a Miami. Cleveland marchaba con récord 6-4 en juegos en esta fecha, la última vez que un 25 de diciembre entró a la duela, fue una victoria de 102-87 ante los Lakers en 2009, en la primera estadía de James con el equipo que lo seleccionó en el Draft.
Pero ahora el nuevo ‘Big Three’ que conforman James, Kevin Love y Kyrie Irving, no pudo ante la exigencia de la quinteta local, que fue respaldada por 22 puntos de la banca.
Love apenas tuvo 14 puntos en el partido, cinco rebotes y tres asistencias, mientras que Irving tuvo un poco más de protagonismo al encestar 25 puntos, cuatro rebotes y tres asistencias.
El Heat mantuvo el dominio en la pizarra durante gran parte del encuentro, hasta que una clavada de LeBron con 11:20 minutos del último periodo, puso adelante a los Cavaliers 78-77. Sin embargo, esta ventaja fue efímera, ya que le cobraron una falta técnica a James por mantenerse colgado en el aro por un tiempo prolongado.
Wade convirtió el tiro libre empatando el partido.
A partir de ese momento, los Cavs perdieron la brújula y Miami se dedicó a culminar la obra.
Cleveland perdió a sus dos mejores jugadores durante un breve lapso de la segunda mitad.
James se fue a los vestuarios, cojeando de la pierna izquierda en el tercer cuarto. Un salto hacia la primera fila de asientos, luego de correr 15 metros, provocó que se doblara el tobillo.
Momentos después, se agarró el área detrás de su rodilla izquierda, pidió salir del juego y cojeó al vestuario. Regresó rápidamente, pero los Cavs también perdieron a Irving por unos momentos, después de que recibió un balonazo en la cara.
En las gradas se observaron fanáticos con playeras de James de todas las fases de su carrera deportiva, desde su paso por la preparatoria, hasta la de ayer en la celebración de Navidad.
Otras playeras mostraron su agradecimiento al ‘Rey’ por lo que consigió y dejó para el legado de Miami.
