Casi una semana después, Matías Britos aún paga las consecuencias del fuerte reclamo a Guillermo Vázquez tras ser sustituido en el cotejo frente al Emelec de Ecuador, por la Copa Libertadores 2016.

Mientras sus compañeros son citados para entrenar con normalidad, el atacante de ensortijada cabellera debe reportar con el plantel Sub-20 de los Pumas. La medida disciplinaria no ha terminado, por lo que es poco probable que sea reintegrado con miras al choque de pasado mañana en Veracruz. Separarlo definitivamente no es un escenario descartado.

El domingo, para el duelo con el Santos Laguna, el director técnico de los auriazules empleó una alineación alternativa, en la que sólo aparecieron dos titulares indiscutibles: el capitán Darío Verón y el lateral izquierdo Luis Fuentes. La mayoría de los hombres que suelen arrancar los encuentros estuvo en la banca, pero el uruguayo participó con la categoría inferior.

Ningún miembro del club se atreve a confirmar el castigo. La directiva hace ‘mutis’; Vázquez, también. Los futbolistas sólo atinan a revelar que el chico se disculpó por el berrinche del jueves.

“Es algo que ya se habló con Memo, Matías, la directiva… Todos estamos tranquilos”, asegura el volante Alejandro Castro. “Es un tema del que no vale mucho la pena ahondar, está tomada la decisión y son cosas que no nos corresponden, sino a la directiva y el cuerpo técnico”.

La participación en la justa continental hace todavía más necesario el aporte de todos los jugadores que integran el plantel universitario. Los viajes a Sudamérica y los pocos días entre partidos obligan a la rotación, aunque —según recuerda el canterano del Cruz Azul— no existen elementos insustituibles.

Valora el aporte de Britos, pero también la fuerza colectiva del actual subcampeón en la hoy llamada Liga MX.

“Son decisiones que deben tomar el cuerpo técnico y la directiva. Nosotros tenemos que enfocarnos un poco más en seguir el día a día normal, trabajar, estar listos para enfrentar el siguiente partido”, considera. “Sabemos que Matías es un jugador importante, pero no es todo el equipo”.

“Le pasó a él, y pudo sucederle a cualquiera, pero sobre cualquier jugador están el equipo y la institución, así es que hay que seguir adelante, trabajando, y dejar un poco de lado ese tema, para enfocarnos en lo que se viene”.

A todos les ha quedado claro que Vázquez no respetará jerarquías si se comete una indisciplina similar. Castro entiende a su compañero, los deseos de jugar que tiene cualquier futbolista, pero también que las consecuencias aparecerán.

“De cierto modo, a todos nos puede pasar. Nada más hay que ser conscientes de las cosas que pueden suceder”, subraya.

El martes, los felinos visitarán al Olimpia de Paraguay, dentro del certamen de la Conmebol. No se sabe si Britos será reintegrado.

Insatisfechos. Tener nueve de 21 unidades posibles y ocupar el undécimo sitio de la clasificación genera molestia en los Pumas, quienes admiten la necesidad de sumar triunfos cuanto antes.

“No podríamos estar contentos”, reconoce Castro. “Hemos hecho buenos partidos y deberíamos tener más puntos; por supuesto que estamos insatisfechos, nadie puede estar conforme con lo que hemos hecho hasta ahora”.

“La realidad es que hemos dejado ir puntos importantes y no lo podemos esconder, hay que ser muy honestos, pero así está ahorita la situación. Nos encontramos ocupados en sacar puntos, empezar a ganar, hilar victorias. Los puntos que dejamos ir ya no regresan”.

Aunque, advierte, todavía no es momento de arrojar la toalla en el Clausura 2016 y enfocarse completamente en la Libertadores.

“Ojalá que lleguemos al final del torneo de Liga con posibilidades de clasificar o clasificados y también poder avanzar a las siguientes fases en Libertadores”, comparte. “Sería muy importante y podemos hacerlo, tenemos plantel para eso”.

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