Arturo Villanueva preside al semifinalista en mejor ritmo, lo que explica la ilusión que asoma su mirada.
El Querétaro sólo perdió uno de sus más recientes nueve partidos (siete victorias y un empate), racha que motiva a la directiva de un club que sueña con llegar a su primera serie por el título del Máximo Circuito.
“El equipo cerró muy bien el torneo y los que hacen eso son los que mejor andan en la Liguilla”, recuerda. “Ojalá no sea la excepción”.
“Tenemos jugadores de experiencia, los jóvenes se han complementado bien... Seguimos soñando con darle una alegría a la afición”.
Sólo ganaron uno de los siete partidos dirigidos por Ignacio Ambriz, lo que obligó a dar un golpe de timón y contratar a Víctor Manuel Vucetich, cuyo proyecto estaba más enfocado al siguiente torneo.
Pero el toque del ‘Rey Midas’ los tiene en el umbral de la instancia decisiva, por lo que resulta inevitable soñar con dar un genuino batacazo y unirse al grupo de clubes que presume un trofeo de monarca en sus vitrinas.
“Desde el primer día dijimos que queremos el campeonato, para eso trabaja toda la gente en el club. Nos emocionamos todo”, revela. “Hay una planeación desde fuerzas básicas hasta el primer equipo y no vamos a descansar hasta que sea un equipo campeón”.
La actual luce como una buena oportunidad. La ‘sui géneris’ clasificación de los equipos que cerraron fuera de casa los cuartos de final les permitirá terminar la confrontación con el Pachuca en el estadio La Corregidora.
Villanueva está consciente de que el Querétaro deberá hacer un buen juego en el primer episodio para tener la opción de aprovechar la localía.
“Siempre ir a una cancha como la de Pachuca es un compromiso importante, pero el equipo viene bien, con una racha positiva, la cual esperemos se siga dando”, comparte. “Ojalá se mantenga el invicto de las últimas fechas y sacar un buen resultado, hacer un gol de visitante que permita manejar con más tranquilidad el juego de vuelta”.
Ese en el que sueña hacer historia con un boleto finalista para los Gallos Blancos de Ronaldinho.
