El estado de Querétaro podría alcanzar un crecimiento económico de alrededor de 3%, mientras que a nivel nacional no rebasará los dos puntos porcentuales, estimó el catedrático de la Escuela Bancaria y Comercial (EBC), campus Querétaro, José González Islas.

Explicó que el estancamiento económico que vive el país es similar al escenario que se presentó el año pasado, donde se pronosticó un crecimiento al inicio de 2013 y durante el año se fue ajustando, esto debido a que fue el primer año de la actual administración.

Sin embargo, este año las reformas estructurales han jugado un papel muy importante en este estancamiento, pues muchos inversionistas frenan la llegada de capital ante la incertidumbre de los cambios en materia de impuestos.

“La reforma fiscal, aplicada a inicios de 2014, ha traído consigo diversas reacciones, principalmente de la iniciativa privada. Las empresas establecidas en México, tanto las de origen mexicano como las extranjeras, han tenido que hacer ajustes para la planificación de su inversión en nuestro país”, comentó el especialista.

Asimismo, el profesor de dicha casa de estudios afirmó que la falta de crecimiento económico se ve reflejada en el incremento de desempleo, sobre todo en Querétaro, que se ubica en alrededor de 6%, superando la media nacional.

Asimismo, la falta de infraestructura de gran importancia, a decir del experto, pues al no tener obras relevantes, se indica que la economía mexicana está pasando por un mal momento.

“Las nuevas reformas estructurales del país traerán sus buenas nuevas, seguramente, hasta el año 2015, vislumbrando un cierre de 2014 gris y con un muy probable nuevo ajuste a la baja del crecimiento económico mexicano en el último trimestre del año”, declaró.

Llegada de inversión

A decir de González Islas, el país es bien visto en el extranjero, sobre todo ahora que se aprobaron las reformas estructurales; sin embargo, “todos esperamos que el detonante económico del país pase de ser anuncios y promesas espectaculares a realidades traducidas en empleo y dinamismo económico”.

Comentó que la llegada de empresas ensambladoras de automóviles como BMW, aportan al país por la mano de obra calificada y barata que ofrece, además de que las entidades en donde se instalan les ofrecen ciertos incentivos como el no pago de impuestos o agua; lo que, en algunos casos, representa más gastos para la entidad que las ganancias que percibe con la llegada de estas grandes industrias.

El académico también comentó que es importante diversificar el mercado, pues depender sólo de Estados Unidos nos deja vulnerables a su economía, como se vio en 2009 con la recesión económica que frenó el mercado automotriz.

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