En su primera edición, el Festival de Cacao y Chocolate: Mexicacao logró conquistar a 7 mil personas, con las delicias de cacao y chocolate que presentaron 30 expositores, originarios de distintos puntos de México; y ahora quieren repetir la misma hazaña pero con más sabor, más invitados y más días para disfrutar de estos productos, que vienen de una semilla alabada en la época prehispánica.
Del 1 al 3 de febrero, en el Museo de Arte Sacro, se realizará la segunda edición de Mexicacao, con la presencia de 40 expositores, que presentarán variados productos para que los asistentes tengan la mejor opción de compra para sus regalos del Día del Amor. Habrá bebidas tradicionales de cacao, como el tascalate, chocolates rellenos, barras, pastelitos, cacao de diferentes partes de México, panadería, postres con chocolate, algunos sin azúcar y hasta veganos.
Vendrán expositores de Oaxaca, Chiapas, Ciudad de México, y por supuesto de Querétaro.
Ricardo Jiménez Ugalde, creador de la marca de chocolate Kuxtal y organizador de Mexicacao, comentó que el evento es un gran foro para exponer el trabajo de productores mexicanos, que en su mayoría laboran de manera artesanal y con apoyo sólo de la familia.
“La primera edición fue bastante bien aceptada, vinieron productores de Tabasco, Chiapas, Oaxaca, Guerrero, y de Querétaro también se presentaron diferentes marcas, ellos son más transformadores, compran el cacao de diferentes partes y lo convierten en bebidas o en barras, dependiendo de cada proyecto. Fueron 7 mil personas en dos días, a los productores les fue muy bien, varios terminaron con todos sus productos, y esa es la idea principal, apoyar proyectos que a veces son pequeños o familiares; queríamos reactivar esa parte, hacer una economía mucho más sustentable a base del cacao, porque al final de cuentas es algo de lo que tenemos aquí en México”.
El festival no sólo atrajo a queretanos, sino a turistas, y eso mismo quiere lograr en su segunda edición, apoyar a los productores e incentivar el turismo.
“Vimos turistas de zonas aledañas a Querétaro, Tequisquiapan, San Juan del Río, o algunas personas de Guadalajara, Guanajuato y San Luis Potosí; además de ayudar a los productores, se activa el turismo, y eso también es parte del mismo evento, por su calidad, la idea es hacer algo en donde no solamente se vean beneficiadas las personas que van a exponer, sino también otros sectores”, agregó.
El evento además sirve para que las nuevas generaciones conozcan la historia del cacao, un grano que se utilizaba como moneda en la época prehispánica, y utensilios tan comunes en algunas casas, pero tan poco conocidos por los más jóvenes, como el molinillo que sirve para hacer un chocolate bien espumoso.
“Estamos esperando a 40 expositores, queremos que haya gran cantidad pero sobre todo con productos de mucha calidad, la idea no es llenar el lugar por llenar, estamos buscando varias opciones y cosas muy interesantes para mostrar sobre todo al público joven, muchos no conocen ciertas cosas, como los molinillos o ubican el utensilio, pero que no saben para qué es, y esto también sirve para rescatar esa parte de la historia, tenemos que retomarlo, siempre un pueblo debe de rescatar su cultura para seguir teniendo identidad”, detalló Ricardo.
Esta segunda Fiesta del Cacao y Chocolate se realizará del 1 al 3 de febrero, en un horario de 11:00 de la mañana a las 8:00 de la noche en el Museo de Arte Sacro. Habrá rifas y degustación de productos para que puedan elegir el mejor regalo para el 14 de febrero.
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