La portada de Mariposas en formol, publicación de Paulina Romero, con una fotografía del artista Josué Torres, muestra a los lectores la mirada del autor, pero que a diferencia de las mariposas que ven los colores rojo, verde y amarillo, este poemario regala una gama interminable de tonalidades para emprender un vuelo a un viaje de sueños, sensaciones y lugares inimaginables.
Además de lo anterior, la portada muestra a los lectores la calidad y sensibilidad de los poemas que podrán disfrutar, por sus colores brillantes, en tonalidades de blancos, negros, dorados, naranjas y amarillos que son característicos de la mariposa monarca.
Las mariposas son criaturas hermosas, elegantes y conmovedoras, por esta razón, no es de extrañar que muchas personas se sientan interesadas en ellas. Incluso su nombre evoca una sensación de encanto y calidez, al escuchar la palabra mariposa, naturalmente, se piensa en algo mítico, mágico y especial. Esto mismo pasa cuando se inicia la lectura del poemario de Paulina Romero.
De tal manera que adentrarse en Mariposas en formol es como el vuelo de estos animales que ocupa un lugar destacado entre nuestros placeres.
El atractivo estético de estas criaturas aladas, así como los de estos poemas, es aún más significativo. Una vez que nos damos cuenta de que las mariposas nos regalan revoloteos despreocupados entre flores, así estos versos revoletean de forma sencilla, frágil y ligera en nuestras mentes.
Las mariposas monarcas son de los insectos más evolucionados, se caracterizan por su resistencia y longevidad, pues mientras otros ejemplares tienen un ciclo vital de 24 días, esta especie llega a vivir hasta nueve meses, es decir, 12 veces más.
Asimismo, estos seres pueden emigrar y emprender vuelos de hasta 5,000 kilómetros, son capaces de volar hacia cualquier lugar que les plazca, como si se tratara de una especie de mensajeros de la naturaleza, añadiendo a está un brillo mágico al entorno.
Mariposas en formol brinda ese mismo brillo espectacular; sin embargo, hace volar al lector más allá de un número determinado de kilómetros, rompiendo los esquemas de lo imaginado.
Durante la lectura de este poemario, es posible ir a Venus o Júpiter y recorrer los paisajes más hermosos, desde verdes prados, bosques de oyameles, desiertos, mares hasta las frías sierras nevadas, se podrán vivir historias de amor, de tristeza, de esperanza hasta una batalla en Troya. Asimismo, se podrá desafiar el tiempo o la gravedad y, a su vez, ser testigo de las diferentes etapas de vida, desde la infancia hasta la edad adulta.
Además de lo anterior, se podrán disfrutar diversos aromas, como el del café o de flores como las orquídeas o las rosas. También será posible visitar otros países, como Granada, Málaga, Marruecos, Portugal, Roma, Egipto, las Islas Filipinas, los Países Bajos hasta el hermoso y colorido Oaxaca.
A través de las páginas de este poemario, se enfrentarán a fieras peligrosas, como el tigre o una hermosa cebra, y se enternecerán con colibrís y pavorreales. Además, el lector podrá conocer personajes como duendes, arlequines, el rey de Francia, el señor de las Indias de América, la reina Alejandra y el rey Alberto Eduardo, junto a doncellas y princesas reales o plásticas. La lectura de cada uno de los poemas conducirán a presenciar el nacimiento del sol, hasta que se funde en una noche oscura para que la luna aparezca brillante o simplemente nos maravilla desde una gota de rocío hasta fundirnos en un interminable diluvio.
Tanto Las Mariposas en Formol como su autora, Paulina Romero Barrientos, tienen cosas en común, pues han sufrido transformaciones durante su ciclo de vida, comenzaron siendo un huevo después una oruga, para transformarse en un capullo y terminar siendo una hermosa mariposa.
Entre aleteos, el lector podrá ser testigo que coincide su belleza, su honestidad, su autenticidad, su sencillez. Sin embargo, los podemos ver frágiles aunque, a la vez, poseen una fortaleza impresionante, nacieron para volar y saben que se encontrarán con obstáculos, adversidades, cambios de clima, caídas, alegrías, tristezas, que tienen que enfrentar y están preparados para su travesía.
