Tras la caída de su imperio en México, Maximiliano de Habsburgo entregó su espada y fue preso, primero en el convento de La Cruz y luego en el convento de Capuchinas; en este espacio, que hoy ocupa el Museo de la Restauración de la República, fue acondicionada con objetos antiguos y réplicas de la época, la celda “El calabozo imperial” donde el emperador pasó sus últimas horas, antes de ser fusilado en el Cerro de las Campanas, el 19 de junio de 1867.

En rueda de prensa, donde dieron a conocer los detalles de La Ambientación de la Celda de Maximiliano, que será inaugurada el 23 de septiembre a las 19:00 horas, la directora del Instituto Queretano de la Cultura y las Artes (IQCA), Laura Corvera, resaltó la importancia de este nuevo espacio relevante para la historia.

La Ambientación de la Celda de Maximiliano, refirió la directora del Museo de la Restauración de la República, Concepción Lambarri Malo, es un proyecto que se contempla desde hace varios años. Pero que en el marco de los 10 años del recinto, en agosto del 2013, se otorgó un apoyo financiero estatal y federal que permitió la adecuación del espacio y ambientación de la celda.

En este proyecto participó la historiadora y curadora Guadalupe Jiménez, quien pertenece al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), y ha colaborado en proyectos como la Casa de Miguel Hidalgo en Dolores.

Lambarri dijo que el lugar donde se ambientó la celda, no es precisamente donde ésta se encontraba, por cuestiones del guión museográfico, y los muebles tampoco son los originales. “Cada objeto se fue investigando y documentando, en dónde estuvieron y en dónde están, cómo estuvieron y los que van a poder ver, algunos son réplicas, otros son objetos antiguos, pero todos nos van a hablar de la última prisión de Maximiliano”.

Fueron 28 días, recordó Lambarri Malo, los que el segundo emperador mexicano estuvo en Capuchinas. Y en ese tiempo, “la gente apoyó mucho a Maximiliano, van a ver ciertos detalles, parece un calabozo imperial, pero fue gracias a que la gente de Querétaro apoyó, daba sus cofres, daba sus baúles, le mandaba la comida todos los días”.

En la rueda de prensa estuvo presente Martha Fabiola Larrondo Montes, directora Estatal del Registro Civil de Querétaro, quien habló sobre la exposición Registro Civil en Querétaro, que se inaugurará en el Museo de la Restauración de la República este 23 de septiembre, con motivo del 155 Aniversario del Registro Civil Nacional.

La serie reúne actas de nacimiento, de defunción y de matrimonio de personajes relevantes en la historia del país, como el acta de defunción de Maximiliano de Habsburgo, y la primer acta de nacimiento del país, que corresponde a Jerónima Francisca Juárez Maza, hija de Benito Juárez.

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