Si encuentra un libro en la calle, en una plaza o jardín, no lo ignore porque puede ser un Libro vagabundo. Él puede estar buscando a un lector para contarle su historia y sorprenderlo.

El proyecto de Libro vagabundo sigue el ejemplo del BookCrossing, una práctica popularizada a nivel internacional que consiste en liberar publicaciones en lugares públicos, con el objetivo de que sean encontrados por las personas para que los lean y luego los vuelvan a liberar para compartirlos con otros lectores.

En Querétaro, el Centro Educativo y Cultural del estado, a través de su programa de fomento a la lectura Si Lees Se Nota, es quien promueve este sistema de liberación de libros.

En 2013, se realizó una liberación simultánea de cinco mil 500 libros vagabundos en todo el estado y para este año buscarán “sumar a otras personas que también empiecen a colaborar con libros y buscar otra donación con editoriales que nos permita realizar una liberación masiva más, lo que queremos hacer es una especie de tradición”, dijo Alejandro Camargo, coordinador del programa Si Lees Se Nota.

La liberación de libros masivos se realizó en el marco del Día Nacional del Libro, y se realizó en plazas públicas, jardines, parques, centros comerciales, paradas de camión, autobuses y escuelas de los 18 municipios que forman el estado de Querétaro.

“Se escogen lugares abiertos, es un poquito dejarlo al destino, si yo me encuentro un libro no me gustaría sortear al destino y que no lo lea, tengo que leerlo para ver por qué me encontró a mí ese libro, entonces buscamos lugares en donde lo pueda encontrar la mayor cantidad de gente posible, lugares que sean abiertos y de fácil acceso”, explicó Camargo.

Divulgación científica, superación personal y novelas de diferentes autores, son los temas de los libros que fueron liberados en el estado, “estamos buscando diferentes tipos de libros que sean interesantes para el mayor número de lectores posibles”, refirió el promotor de lectura.

Cada uno de los ejemplares tienen una etiqueta de saludo que dice: “Hola, soy un libro vagabundo. Lee mi historia y compárteme con los demás”. En esa misma etiqueta hay un código con el cual se puede acceder a la página de Querétaro Lee o Si Lees Se Nota en donde se puede registrar la ubicación del libro para conocer los lugares por donde ha viajado y hacer un comentario de su contenido para continuar fomentando la lectura.

Querétaro sí lee

En Querétaro se realizan al día de 5 a 10 actividades de fomento a la lectura en bibliotecas, salas de lectura o con padres promotores, explicó Laura Corvera Galván, directora del Instituto Queretano de la Cultura y las Artes (IQCA).

En la entidad hay 64 bibliotecas dentro de la Red de Bibliotecas que se enlaza a la Red Nacional de Bibliotecas, 118 Salas de Lectura y 12 Paralibros, distribuidos en los municipios de Querétaro, San Juan del Río, Jalpan, Corregidora, El Marqués, Pedro Escobedo, Pinal de Amoles y San Joaquín, y se pretenden instalar ocho Paralibros más.

En el 2013, se realizó la presentación de Querétaro lee (http://qrolee.com/) plataforma virtual que busca reunir a todas las instituciones dedicadas al fomento de la lectura en la entidad, tanto públicas como privadas, para promover en conjunto sus actividades y continuar con el objetivo de impulsar la lectura en Querétaro. A este proyecto se sumó el IQCA, el Instituto de Cultura del municipio de Querétaro y el programa de fomento a la lectura Si Lees Se Nota, entre otras instituciones.

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