El próximo 6 de noviembre se cumplirá el primer aniversario luctuoso de Guillermina Bravo, la mítica “bruja” que revolucionó la danza contemporánea en México, y en el Colegio Nacional de Danza Contemporánea, que creó en Querétaro, su espíritu sigue vivo, en todos los salones se escucha la música de los pies desnudos, rosando la madera del piso, danzando, tal y como le gustaba a la maestra Bravo.
En la celebración del Día de Muertos se montó en el Colegio Nacional de Danza un altar dedicado a su memoria, en donde lucieron sus cigarros preferidos y una frase dicha por la bailarina y coreógrafa: “Donde terminan las palabras inicia la danza”.
Aniversario luctuoso. Para el 6 de noviembre, día en que se cumple el primer año de su fallecimiento, no se tiene programado ningún evento especial, pues su memoria se honra día a día en cada clase.
Pero, para conmemorar a la coreógrafa junto con el público, están programando, del 10 al 29 de noviembre en Querétaro, mesas redondas sobre la obra de la bailarina.
Mientras que el 13 de noviembre, día del aniversario del natalicio de la llamada "madre y bruja" de la danza contemporánea en México, se ofrecerá la conferencia Vida en el aire por Rosario Manzano.
Además tendrán un taller de improvisación, un ciclo de funciones con el grupo Epícentro, y todas las actividades del Foro Experimental del CENADAC, estarán dedicadas a la memoria de Guillermina Bravo.
Para el día 15 de diciembre en Palacio de Bellas Artes, darán una función especial los alumnos del Colegio y los integrantes de Drama Danza, con la dirección de Rossana Filomarino.
